La mañana de este miércoles estuvo cargada de emociones en el centro neurálgico del barrio de Nervión. Fue allí, en el Ramón Sánchez-Pizjuán, donde García-Pimienta fue presentado como nuevo entrenador del Sevilla FC. El ex de Las Palmas, aparentemente ilusionado, enérgico y con un pasado lejano con respecto al club, se mostró preparado para afrontar este reto. Con una energía y unas sensaciones distintas aparecieron Víctor Orta y José María del Nido, conscientes de que durante su comparecencia debían rendir cuentas en el balance de la última temporada, donde los resultados negativo, la insuficiente posición liguera y la no clasificación a competición europea invitaban a pensar que la rueda de prensa tendría un alto nivel de temperatura. Por un lado, Víctor Orta reflexionó con positividad sobre su gestión al frente del proyecto deportivo y optimista sobre la temporada que se acerca. Por el otro, el máximo mandatario de la entidad, José María del Nido Carrasco, reiteró que su principal objetivo es la regeneración deportiva en medio de un maremoto de cuestiones críticas sobre la presencia de béticos en el Consejo, las palabras de Quique Sánchez Flores en su despedida acerca de la difícil continuidad de Sergio Ramos o la postura de la afición sevillista y las constantes peticiones de dimisión, cristalizadas en el último partido en casa ante el FC Barcelona. De todo ello reflexionó el presidente:
En primer lugar, José María respondió al que fuera el antecesor de García-Pimienta en el banquillo, después de que Quique Sánchez Flores cuestionara el panorama deportivo y la influencia en la continuidad de Ramos: "No voy a valorar la opinión de Quique. Quiero darle las gracias por lo mucho y bueno que logró en el club. Con respecto a la situación con Sergio, él conoce la idea del club. No soy futurólogo, no sé como será la conversación pero la tenemos pendiente".
Por otro lado, no quiso eludir las cuestiones sobre el debate planteado en torno a la continuidad o la dimisión de su figura como presidente del Sevilla FC. "Es cierto que la situación que se vivió en el ultimo partido no es agradable. La afición pitó al palco, pero yo estoy focalizado en la regeneración deportiva. La afición es soberana. Estamos focalizados en trabajar para que la afición esté orgullosa. Aun así, prefiero que los pitos fueran al palco, especialmente a mi persona, y no a los jugadores, por el bien del Sevilla".
Sobre el ambiente de crispación, Del Nido fue claro y comprensivo: "La situación de crispación que vive el Sevilla es fruto de que no tiene resultados deportivos. Yo estoy centrado en crear un proyecto a largo plazo y sentar las bases del Sevilla FC. Lo único que me he planteado es regenerar deportivamente al Sevilla".
Finalmente, Del Nido fue cuestionado sobre la presencia de béticos en el Consejo del Sevilla FC, dado el revuelo causado a su alrededor tras las declaraciones de su padre, José María del Nido Benavente. "Todos sabemos lo que está pasando en el Sevilla. Del Nido Benavente, que no es capaz de asaltar el Sevilla de forma legal, quiere enfrentar al sevillismo. Juande Ramos, que pasó por el Betis, fue el entrenador mas grande del Sevilla y si no, está ahí, ahí. No puedo respetar que se nos enfrente con información demagógica de forma interesada. Aprovecharía para decir que se dejen de dar datos personales de trabajadores que no tienen nada que ver y no tienen que aportar. No es algo ético".