Alejandro Sáez3 min lecturaEl Real Valladolid trabaja en la planificación deportiva de la próxima temporada, en la que los de Pucela volverán a participar en Primera división, habiendo conseguido el ansiado ascenso semanas atrás.
Tras las incorporaciones de Monchu Rodríguez e Iván Sánchez, el conjunto pucelano está a punto de cerrar la incorporación de su tercer refuerzo. Se trata del exsevillista Sergio Escudero, quien se encuentra libre tras haber quedado libre con el Granada CF, al que llegó el pasado verano tras firmar por una temporada y con el que ahora, tras el descenso a Segunda, no tenía intención de ampliar su vinculación.
Las negociaciones entre el Real Valladolid y Escudero, nacido en Valladolid, están muy avanzadas. El entendimiento entre las partes existe, aunque por el momento no ha acabado de cerrarse nada, tal y como apuntan diversas informaciones procedentes desde Valladolid.
En estos momentos, de hecho, se está discutiendo la duración de su contrato con el Pucela, que sería de uno o dos años, como desearía el futbolista.
De concretarse su fichaje, el vallisoletano Sergio Escudero volvería a casa, aunque sería la primera ocasión que vestiría como blanquivioleta, iniciando su carrera en el Betis CF de Valladolid antes de dar el salto como profesional con el Murcia. Luego militaría en Getafe, Schalke, Sevilla FC y Granada CF, hasta encontrarse ahora sin equipo a sus 32 años.
Como futbolista del conjunto nazarí, Escudero ha disputado 27 partidos en su última y única temporada, en los que anotó 27 goles y dio una asistencia.
El Valladolid, por su parte, ha puesto sus miras en Escudero como refuerzo con experiencia para su lateral zurdo, donde Lucas Olaza y Raúl García podrían salir. La renovación de Nacho Martínez, por su parte, se encuentra paralizada.
En lo que respecta al Granada CF, Escudero era muy del gusto de Karanka, quien lo veía como un jugador de garantías para la Segunda división. Sin embargo, la reducción de salario que suponía el descenso ha colocado al Valladolid en una situación más cómoda a la hora de negociar con el futbolista.