El AFC Ajax de Ámsterdam ha emitido este martes un comunicado en el que asegura que se ha llevado "una sorpresa muy desagradable" con la negativa de la Real Sociedad a vender entradas a los aficionados del club neerlandés de cara al encuentro que ambos equipos disputarán en el estadio Reale Arena de San Sebastián el próximo 28 de noviembre, en la que será la quinta jornada de la Fase de Grupos de la Europa League -antes se jugará la cuarta la semana que viene- y anunció que ha denunciado el caso ante la UEFA para pedir la intermediación del órgano que preside Aleksander Ceferin.
"El AFC Ajax se ha llevado una sorpresa muy desagradable este pasado lunes con el anuncio de que el club español de la Real Sociedad tiene la intención de no proporcionar entradas para los aficionados visitantes", arranca el comunicado con el que el club más laureado del fútbol de los Países Bajos, un escrito en el que advierte de que no aceptará esta postura de la entidad donostiarra sin pelear por los derechos de sus hinchas, alegando que está a la espera de una respuesta con la decisión final de la UEFA, en cuya reglamentación se prohibe este tipo de vetos.
"En las últimas semanas, Ajax ha tenido múltiples reuniones con la UEFA, con la Real Sociedad y las autoridades locales para organizar el partido. De esas conversaciones se concluyó, entre otras cosas, que tanto el club (español) como la ciudad (de San Sebastián) han tenido varias experiencias negativas con visitas anteriores de aficionados de otros clubes extranjeros. El Ajax parece estar ahora pagando las consecuencias", lamenta en su escrito anuncio.
El club franjirrojo se refiere a que la razón que le ha trasladado la Real Sociedad es que busca evitar incidentes como los protagonizados a principios de este mes por los aficionados del RSC Anderlecht en Donostia y en Anoeta. Durante la primera mitad del partido de la tercera jornada de la Europa League, ultras del equipo belga lograron romper la valla de seguridad instalada en la grada visitante y arrojaron objetos, entre ellos asientos, a la grada inferior, en la que presenciaban el partido aficionados 'txuri-urdin', entre ellos muchos niños al tratarse de la 'grada familiar'.
Cinco personas fueron detenidas por presuntos delitos como atentado a la autoridad, desórdenes públicos o daños y resistencia a los agentes, mientras que la UEFA sancionó al Anderlecht con la prohibición de vender entradas a sus aficionados en tres partidos a domicilio. No obstante, además de esos malos precedentes en la única cita como local en Europa esta temporada, cabe recordar también que no es la primera vez que los aficionados neerlandeses son vetados por autoridades locales en el extranjero. Sin ir más lejos, hace dos semanas se prohibió la entrada a los seguidores del PSV de Eindhoven al partido en París de la Champions League contra el Paris Saint-Germain y la temporada pasada los seguidores del Feyenoord de Róterdam también fueron rechazados en Roma.