Raúl de Tomas está acostumbrado esta temporada a recoger las migajas que, en el Rayo Vallecano, le dejan. Muy lejos de lo que fue en la entidad en la campaña 2018/2019, donde jugó 33 partidos y anotó 14 goles. Ahora está a la sombra de un Sergio Camello que se ha ganado la titularidad y que es canterano del Atlético de Madrid. Hoy los colchoneros se enfrentan en Vallecas a un Rayo que no le está dando oportunidad a Raúl de Tomas. Salvo sorpresa, RDT volverá a quedarse en el banquillo y le dará tiempo para pensar en cómo habría cambiado la historia si en el pasado mercado veraniego se hubieran podido cumplir sus pretensiones. Si, finalmente, Morata hubiera salido del Atlético de Madrid y el club hubiera pactado el traspaso de RDT con el RCD Espanyol. Puede que incluso hubiera disputado este mismo choque hoy, pero vestido con la elástica de los de Simeone y compitiendo con Camello. Pero no por la titularidad, sino por la victoria del equipo. O puede que no, puede que en el Atleti tampoco hubiera ganado un sitio.
Protagonizó uno de los mayores culebrones del pasado verano en el mercado de fichajes. Raúl de Tomás se convirtió en uno de los delanteros más cotizados. Su buen hacer en una selección española entonces comandada por Luis Enrique fue clave para que se despertara un interés mayor y el RCD Espanyol no quería desaprovechar la oportunidad de poder hacer caja. La cláusula de rescisión estaba en 70 millones de euros, por lo que no era fácil. Su nombre sonó para clubes como el Real Madrid, como sustituto de Mariano, el Atlético de Madrid, la Real Sociedad e incluso el Sevilla FC. Lo único que era un secreto a voces es que RDT no quería continuar en el equipo perico. El atacante tenía contrato hasta 2026 y el club veía incluso con buenos ojos hacer factible una cesión posponiendo su traspaso. Finalmente, recaló en el Rayo Vallecano no sin antes polémica. Conocida es la pelea que mantuvo Martin Presa con el agente del jugador y los abogados durante la negociación de su traspaso.
Su traspaso se retrasó demasiado y no de la forma esperada: tan sólo 8 millones, capaces de llegar a 11 en variable. Las pretensiones eran tan altas que no solo no lograron la cuantía pretendida, sino que el futbolista salió muy mal parado. Al llegar el traspaso fuera del mercado, Raúl De Tomás no pudo inscribirse en el equipo hasta el mercado invernal. Un momento en el que, además, no tenía prácticamente hueco en el grupo que Andoni Iraula, entrenador del Rayo, tenía creado. Al delantero le tocó quedar relegado en el banquillo, a la sombra de Sergio Camello, canterano de un Atlético de Madrid que lo había pretendido.
Las estadísticas son demoledoras para el futbolista madrileño, que ha pasado por la cantera del Real Madrid: en el Rayo es suplente. Camello es el delantero referente del cuadro de Vallecas y a Raúl de Tomás le han dejado las migajas: ha disputado minutos en 10 partidos, de ellos solo 2 ha sido titular. Además, de los dos encuentros en los que ha sido titular, solo en uno ha sentado a Sergio Camello en el banquillo.