Manuel Pedrero13 min lecturaLa Premier League completó este fin de semana la jornada 23 en el calendario. El Liverpool no cede al ganar al Ipswich Town y continúa ocupando el liderato en la clasificación incluso con un partido menos por jugar. El Bournemouth de Andoni Iraola sigue intratable y arrolla del mapa al Nottingham Forest. Aunque el encuentro estelar se vivió en el Etihad Stadium donde el Manchester City recobra sensaciones al remontar al Chelsea con especial mención al papel de Erling Haaland. Este domingo el Manchester United se llevó los tres puntos de Craven Cottage gracias a un gol de Lisandro Martínez en la recta final. El Tottenham se dejó sorprender en casa por el Leicester City de Ruud van Nistelrooy (1-2).
El Bournemouth de Andoni Iraola bajó de la nube al equipo revelación de la Premier League, el Nottingham Forest, al que endosó un 5-0 con una buena actuación de Kepa Arrizabalaga y un triplete de Dango Ouattara. Antes de medirse al líder, el Liverpool, el equipo de Iraola firmó una exhibición frente el tercer clasificado de la Premier, al que infligió su derrota más dura del curso. Firma once jornadas sin perder y se sitúa en un meritorio sexto puesto provisional, en plena pelea por posiciones europeas. Justin Kluivert y Semenyo completaron la goleada.
El Everton confirmó su mejoría con su segundo triunfo consecutivo, que le aleja siete puntos de la zona de descenso, gracias a un penalti polémico señalado desde el VAR que aprovechó Ndiaye para prolongar la mala dinámica del Brighton como local.
Desde el 9 de noviembre no gana el Brighton en el Amex Stadium. El día que tumbó al Manchester City de Pep Guardiola fue el último que dio una alegría a sus aficionados. Todo lo que gana fuera, lo deja escapar en su estadio. De conquistar Old Trafford a un ejercicio de impotencia dominando al Everton pero sin capacidad para marcar.
El Liverpool, líder de la Premier League, con seis puntos de ventaja y un partido menos que el Arsenal, recuperó la contundencia en un partido plácido en Anfield, con un potencial ofensivo a años luz del Ipswich Town, en una exhibición de virtudes de Alexander-Arnold, de elegancia de Szoboszlai y rematadora de Gakpo (4-1).
Tuvo poca oposición para confirmar el regreso a la mejor de sus versiones el Liverpool. Líder de la Champions con un impecable pleno de triunfos y de la Premier dejando en el olvido dos empates consecutivos que apenas alimentan las esperanzas de sus perseguidores. Del trabajado triunfo sobre la bocina en la visita al Brentford al paseo frente al Ipswich. No hay bache para los de Arne Slot.
Dominador desde el pitido inicial. Luciendo una banda derecha difícil de frenar en días en los que Alexander-Arnold se convierte en un futbolista indescifrable. Tan válido para meter un centro medido desde el costado derecho como para sorprender al espacio por dentro. Asociado con Salah, que firmó un gran primer acto para dejar el partido sentenciado y reservar fuerzas.
El extraordinario momento del delantero sueco Alexander Isak reanimó al Newcastle, derrotado la semana pasada por el Bournemouth, y, con un doblete en el St Mary's Stadium, campo del colista, el Southampton, llevó al triunfo (1-3) a su equipo, metido de lleno en la pelea por los puestos de Liga de Campeones. El cuadro de Eddie Howe retomó el camino correcto después del resbalón de la jornada anterior, superado por el Bournemouth, que cortó una racha de seis victorias seguidas en Premier que acumulaban las 'urracas'.
El acierto en el momento menos esperado del italiano Riccardo Calafiori, autor del único gol del partido, y la solvencia del meta español David Raya, al rescate en el tramo final, cuando el Wolverhampton más apretaba, dieron aire al Arsenal que volvió a la senda del triunfo una vez que la expulsión de Joao Gomes devolvió la igualdad de fuerzas.
Y es que el Arsenal, que tropezó la fecha anterior, con un empate contra el Aston Villa, oscureció su panorama cuando se quedó con diez, por la expulsión con roja directa de Myles Lewis Skely, por una dura entrada sobre Matt Doherty un minuto antes del descanso.
Estuvo abierto el encuentro en el que el Arsenal sintió la presión, la necesidad de no dejarse más puntos. Asumido el despegue del Liverpool, inalcanzable para los demás, aspira a poner cerco alrededor del segundo lugar que tiene el cuadro de Mikel Arteta. Aprieta el Nottingham Forest, el Chelsea, el Newcastle y el Manchester City. Está abierta la lucha por los puestos de la Liga de Campeones.
El Manchester City, con un gol del noruego Erling Haaland en el ecuador de la segunda parte, con intervención directa de los dos porteros, el local Ederson, que dio el pase, y el visitante, el español Robert Sánchez, fuera de sitio, cimentó una remontada ante el Chelsea (3-1) en el estreno del egipcio Omar Marmoush y el uzbeko Abdukodir Khusanov en el equipo de Pep Guardiola.
La victoria, una más sobre el Chelsea, que no puede con el City desde mayo de 2021, doce partidos atrás, aparca el sofoco europeo en París, ante el PSG, que afeó el panorama continental del cuadro de Guardiola, que el miércoles afronta un duelo decisivo contra el Club Brujas en la Champions.
Mientras eso llega intenta el City reconducir su situación en la Premier con la mirada puesta en los cuatro primeros puestos de la clasificación. Ya está en el cuarto lugar, al que aspira también el Chelsea.
Los goles en la última media hora de Bryan Mbeumo, en la repetición del primer lanzamiento fallado de penalti, y Kevin Schade, con un cabezazo, dieron la victoria al Brentford frente al Crystal Palace, ambos en la mitad de la clasificación. El conjunto local redujo diferencias con el 1-2 de Romain Esse, recién entrado al campo, pero no cambió el desenlace del encuentro, que amplía a cuatro puntos la distancia entre el Brentford, undécimo, sobre el Palace, duodécimo. Ambos mantienen una cómoda ventaja sobre el descenso, a once puntos del Palace y a quince del Brentford, pero Europa sigue lejos del segundo de ellos, a nueve de la sexta posición.
El Leicester de Ruud Van Nistelrooy marcó dos goles en apenas tres minutos de margen en el inicio de la segunda parte para remontar al Tottenham, doblegado en casa entre su crisis interminable, con seis derrotas en las últimas siete jornadas, en la decimoquinta plaza y con Ante Postecoglou en una situación más que comprometida.
A ocho puntos del descenso ya, el equipo londinense aún fue más allá en su terrible momento actual. Tan solo ha sumado un punto de los últimos 21 por los que ha competido en la Premier, nada más ha ganado uno de sus once duelos más recientes en este torneo y este domingo ni siquiera le sirvió de nada adelantarse en el marcador ante el penúltimo de la clasificación cuando inicio la jornada. El Leicester encadenaba siete derrotas ligueras.
El 1-0, en el minuto 32, fue de Richarlison. El brasileño cabeceó a gol un centro perfecto de Pedro Porro. El Tottenham se sentía superior en su campo, hasta el inicio del segundo tiempo, que lo cambió todo de repente: el 1-1 fue al minuto y 58 segundos de volver del vestuario, anotado por Jamie Vardy; el 1-2, en el minuto 49 y 12 segundos, fue de Bilal El Khannouss, con un certero derechazo tras una pérdida de balón entre Porro y Bentancur.
Con un tanto de Emerson Palmieri en el tramo final del partido, el Aston Villa empató 1-1 con el West Ham y sufrió otro frenazo, el segundo consecutivo, que mermó sus opciones de jugar la próxima temporada en Europa. El equipo de Unai Emery acumula una racha de tres encuentros seguidos oficiales sin conseguir la victoria. Al empate frente al Arsenal en la Premier League del pasado fin de semana se sumaron la derrota contra el Mónaco (1-0) en la Liga de Campeones y, este domingo, un nuevo pinchazo en su estadio contra el West Ham.
Y eso que comenzó bien el partido, con el tempranero tanto de Jacob Ramsey, que a los ocho minutos abrió el marcador en un mano a mano ante Alphonse Areola tras apoyarse en Ollie Watkins con una pared al borde del área. El Aston Villa, entonado con el tanto de Ramsey, acumuló muchas ocasiones claras a lo largo de la primera parte. Sin embargo, la falta de puntería de Leon Bailey, Matty Cash, Youri Tielemans y del mismo Watkins, dejaron el resultado en el aire y a su rival con opciones de sorprender en Villa Park.
El West Ham aguantó otro chaparrón al inicio del segundo acto, en el que ni Lucas Paqueta ni Carlos Soler consiguieron sentenciar el partido, y en el último tramo creció para terminar con un punto en el bolsillo gracias a un certero cabezazo de Emerson que dejó al Aston Villa a tres puntos del Chelsea, último equipo con billete europeo tras la disputa de 23 jornadas de la Premier League.
El único tiro a portería del Manchester United significó la victoria frente al Fulham (0-1), transformada por un golpe de fortuna y un zurdazo de Lisandro Martínez que desvió decisivamente Sasa Lukic y que superó al portero Bernd Leno en su inesperada parábola, en el enésimo partido anodino de los 'Diablos Rojos'. Demasiado premio para la falta de ambición del United, que en todo el encuentro generó sólo una decena de toques de balón dentro del área rival, pero una victoria cuyo valor es fortísimo para el equipo de Rubén Amorim, rescatado por el gol del defensa central argentino en el minuto 78, con el que esconde, bajo un marcador favorable, todas las grietas, concesiones y dudas que representa el United sobre el terreno de juego.