Jesús Galiano3 min lecturaEl futuro de Javi Calleja al frente del Real Oviedo está en entredicho. Tras una serie de malos resultados, el equipo ha pasado de aspirar a los puestos altos a ver en riesgo su posición en la zona de playoff. El próximo partido ante el Málaga se perfila como una prueba de fuego para el entrenador, que necesita un triunfo para despejar dudas y recuperar la confianza del club y la afición.
El Real Oviedo acumula cuatro encuentros sin conocer la victoria, logrando solo un punto de los últimos 12 en disputa. Este desplome en el rendimiento ha generado incertidumbre en la entidad asturiana, que hace apenas un mes soñaba con el ascenso directo. La derrota ante el Granada CF ha sido especialmente dolorosa, ya que el equipo mostró una versión gris y solo reaccionó en la recta final del encuentro.
La situación ha llevado a Calleja a llamar la atención de sus jugadores. En el vestuario, el técnico abroncó a la plantilla por su falta de comunicación en el campo y la falta de intensidad. "Cada uno tiene que reflexionar sobre qué puede mejorar, porque así no vamos a lograr nada", afirmó el entrenador ante sus futbolistas.
El Oviedo se enfrentará el próximo fin de semana al Málaga en el Carlos Tartiere, con la obligación de romper su mala racha. Abril será un mes clave para definir su futuro en la categoría, con partidos ante Éibar, Racing de Ferrol, Córdoba y Levante. Estos encuentros podrían determinar si el equipo logra estabilizarse o si sigue cayendo en la tabla.
A pesar del complicado panorama, Calleja se muestra firme: "Estoy con más fuerza que nadie". No obstante, desde la directiva ya han comenzado a sonar nombres como posibles sustitutos en caso de que la crisis continúe.
Las rotaciones y decisiones tácticas del entrenador han generado críticas. Por ejemplo, la ausencia de Colombatto en el once inicial ante el Granada fue una de las sorpresas, aunque el técnico justificó la decisión en la necesidad de darle descanso. También han surgido dudas sobre el uso de Hassan en una posición más centrada, aunque Calleja defiende que "en esa anarquía se siente cómodo y puede aportar muchas cosas".
El club ha comenzado a evaluar alternativas en el mercado por si la situación no mejora en los próximos encuentros. De momento, Calleja sigue en el banquillo, pero el margen de error se reduce con cada jornada que pasa.