Una vez más Osasuna se quedó con la miel en los labios. El conjunto rojillo hizo méritos para vencer a Las Palmas en El Sadar, pero el resultado final fue de tablas en el luminoso por 1-1. Cierto es que gran culpable de que ninguno de los dos equipos se llevara los tres puntos en el templo rojillo la tiene el guardameta Álvaro Valles, pero la polémica está abierta por dos detalles concretos que terminaron perjudicando al equipo de Jagoba Arrasate. En la tarde del sábado 11 de noviembre del 2023, El Sadar se lamentaba en dos momentos concretos: un posible penalti que no fue señalado y un gol fantasma que no subió al luminoso por milímetros. En ambas, que sí fueron revisadas en el VAR, el conjunto de Pamplona salió perjudicado.
La primera de las acciones polémicas mencionadas de la tarde llegó en la primera mitad. Hacia el minuto 37 de partido y en un momento de presión en el ataque rojiblanco, Budimir logró rematar con la cabeza. El esférico se topó con el brazo de Mika Mármol, extendido este. La trayectoria del balón quedó modificada: casi pudo haber sido gol, pero Álvaro Valles se estiró para evitarlo con una buena parada.
Había reclamos de mano, no obstante el colegiado no lo señaló. La jugada se estaba revisando en la sala VOR y, antes de que se lanzara el córner, Figueroa Vázquez lo paró hasta que terminasen desde al VAR la pertinente revisión. La mano estaba bastante despegada del cuerpo de Mika Mármol, ocupando un importante espacio y terminó influyendo en cómo fue el trayecto del balón tras el remate. No obstante, el desde la sala VOR, en la que estaba Del Cerro Grande, indicaron que no hubo nada. Sobre esto habló el propio entrenador rojillo: "Mika Mármol abre el brazo cuando Budimir remata. El problema no está en si hay mano o no, que la hay, el tema está en que a veces es penalti y otras veces no. Estamos todos confundidos", zanjó Arrasate.
La siguiente acción que generó un buen revuelo vino cuando el marcador lucía un 0-0 en El Sadar. El primero de la tarde estuvo cerca de anotarse después de que tras un córner botado por Chimy Ávila David García rematara. Valles lo despejó, pero en el directo parecía que el esférico había entrado por completo en la portería defendida por Las Palmas.
El capitán rojillo protestó la acción para reclamar el gol: la normativa indica que para que suba un gol al marcador el balón tiene que superar por completo la línea de gol. En la Liga española no existe el mecanismo que sí tienen otras competiciones (Ligue 1, Bundesliga, Premier o Serie A), denominado 'Ojo de Halcón', para detectar automáticamente estos casos. El VAR (con sus cámaras) es el encargado de revisar este tipo de acciones. Sobre este momento del partido, también habló Jagoba Arrasate a los medios. Aseguró que "tiene que ser un acto de fe, porque no hay tecnología". Y agregó: :"Igual el balón ha entrado al 99'9%, pero no del todo", dijo.