Presidentes y directivos de LaLiga cuestionaron la nueva Ley del Deporte que se tramita en el Congreso y demandaron que "ayude a seguir creciendo al fútbol profesional" y "no afecte acuerdos como el firmado con CVC" por la mayoría de los clubes.
En declaraciones difundidas por LaLiga, los presidentes del Sevilla, José Castro, el Cádiz, Manuel Vizcaíno, el Alavés, Alfonso Fernández, el Levante, Quico Catalán, y el Huesca, Manuel Torres, se expresaron así, junto a los directores generales del Osasuna, Francisco Canal, el Granada, Alfredo García, el Valencia, Javier Solis, y el Valladolid, David Espinar.
Los clubes trasladaron sus inquietudes esta semana sobre la nueva ley al ministro de Cultura y Deporte, Miquel Iceta, ante la retirada de varias enmiendas al texto por acuerdo entre el Gobierno y el Partido Popular.
La ex directora general del Granada CF también se ha posicionado en contra de esta ley que daría más facilidades para crear la independentista Superliga.
Sobre esta idea planteada por el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, una de las enmiendas planteadas, "daba capacidad a LaLiga y la Real Federación Española de Fútbol para vetar a un club que participase en una competición internacional no reconocida por UEFA o FIFA. Al quitarla, se abre la posibilidad de que equipos como el Real Madrid o el FC Barcelona participen y puedan compaginar con competiciones nacionales", asegura Rodríguez.
Además, la enmienda "buscaba mantener el art. 46 de la actual ley del deporte, que dice que ante cualquier modificación normativa de la Real Federación Española de Fútbol que afecte al fútbol profesional, el Consejo Superior de Deportes requerirá un informe previo y favorable de LaLiga al cambio. Esto puede suponer que si la Real Federación Española de Fútbol quiere cambiar el número de equipos a 16 para reducir la carga de partidos de los grandes equipos en campeonato nacional, puede hacerlo sin importar lo que diga LaLiga, y en consecuencia, los derechos de televisión bajarían porque implicaría menos meses de suscripción de los abonados", señaló.
Sobre LaLiga impulso, con los fondos CVC, esta enmienda cubría la "inseguridad jurídica a la hora de explotar los bienes y derechos por parte de LaLiga. Esto puede suponer que la inversión de CVC Capital Partners se reduzca de 2.000MM-€ a 1.000MM-€ y que se convierta en un préstamo a devolver en 15 años porque el acuerdo contemplaba una cláusula que permitía a CVC Capital Partners hacer este cambio si se modificaba la ley. Esto podría traer impagos, porque los clubes no tienen capacidad de devolver esa deuda en 15 años, pondría en riesgo la aplicación del control económico y se reduciría el nivel de crecimiento previsto", criticó.
No fue la única en posicionarse, pues esta Ley del Deporte hecha a medida para solo unos pocos ha traído sus consecuencias. Por ejemplo, el presidente del Sevilla FC, José Castro, presentó su dimisión irrevocable como miembro de la Junta Directiva de la RFEF.
Asimismo, el director general del Granada CF, Alfredo García Amado, siguió esta línea de crítica contra esta ley.
"Cumplimos con nuestras obligaciones, generamos empleo, pagamos a la Seguridad Social, a la Agencia Tributaria, un modelo en el que crecemos no solo los grandes clubes, que son los que están promoviendo, con el amparo del Gobierno y sorprendentemente también con el apoyo de la oposición, volver a un modelo en el que había unas desigualdades enormes y se limitaba muchísimo el crecimiento de equipos más modestos", advirtió García Amado.