Con la tranquilidad que da un seis de seis, el entrenador del Granada CF, Aitor Karanka, afronta con optimismo el duelo ante uno de los equipos revelación de Segunda, un Villarreal B que sigue al ritmo que le llevó a sorprender a todos en el 'play off' de ascenso y que le ha hecho arrancar la temporada como un tiro. El técnico vitoriano tiene claro a lo que se enfrenta, cómo hacerle frente e, incluso, que once va a oponerle; justo antes del arranque de una semana en la que se cierra el mercado y en la que quedará definitivamente cuadrada su plantilla.
Ante esto, Karanka no se moja, asegura estar igual de tranquilo y considera que, aunque no llegue nada, tiene equipo para lograr todo lo que quiere; y que lo que la dirección deportiva le pueda añadir a este grupo sólo servirá para sumar.
"Estoy tranquilo porque el grueso de la plantilla está hecho. El grupo está compitiendo y, como entrenador, tengo alternativas para jugar de diferentes maneras y con varios sistemas, incluso en un mismo partido. Ese trabajo que se ha hecho hasta ahora nos hace estar tranquilos. Lo que se pueda pasar esta semana ya se verá, pero sin ninguna prisa y sin un objetivo fijo que cumplir", aseguraba el de Vitoria-Gasteiz.
Esa tranquilidad también la aprecia en el equipo, que ha podido preparar bien este partido amparado por los resultados. "La dinámica viene siendo buena desde el primer día de pretemporada, trabajamos sabiendo que llevamos dos partidos, que los resultados siguen siendo bien y que hay que trabajar para seguir progresando", aseguraba Karanka, quien admite que lo que más le ha gustado de estas dos primeras jornadas ha sido el "compromiso de los jugadores". "Es lo que más me gustó. En el partido del sábado, el Racing nos llevó en el primer tiempo al partido de interrupciones que querían ellos y nos contagiamos. Y en Los Cármenes tenemos que evitar que pase eso y marcar el ritmo del encuentro. Lo que más me gustó fue la predisposición para cambiarlo. Como he dicho siempre, los cinco cambios te varían un partido y los cambios de Óscar (Melendo) y Meseguer para dar ese cambio y con Jorge (Molina) arriba, hicieron que el equipo aguantara más el balón. Y con los tres centrales, aunque fueron cuatro o cinco minutos, los jugadores salieron con todo. Lo importante es que, independientemente del sistema, el jugador salga convencido de que los tres puntos son importantes", añadía.
Esa predisposición de todo el grupo tal vez le haga más difícil decidir un once ante el filial del Submarino amarillo, pero el técnico del Granada CF lo tiene más o menos claro. "Me queda alguna duda porque quedan dos entrenamientos y puede haber jugadores con molestias, pero sí tengo claro el grueso del equipo. Que lo tenga decidido yo no significa que lo sepan los jugadores", admitía y reconocía al mismo tiempo que una de esas dudas puede estar en tener ya a Melendo de inicio o seguir metiéndolo poco a poco. "Óscar está bien, ya demostró el otro día que puede hacer esa diferencia. Es una de las preguntas que tengo ahora, si puede estar para empezar, para 70 minutos, para 90... o para lo que esté. Quedan dos días y tengo que pensar jugadores como Óscar", advertía.
Otro que se suma es Yann Bodiger, al que un virus le impidió jugar la pasada semana. "En el caso de Yann, ha estado entrenando desde el principio de semana con nosotros. Después de un virus así, no estaba al 100%, pero ahora sí está para competir si decido que al final juegue", aseguraba Karanka.
En cuanto al partido ante el Villarreal B, el preparador vasco tiene claro que habrá que sufrir. "Espero un encuentro abierto, porque los filiales se caracterizan por la calidad de los jugadores y su desparpajo. Vamos a tener que estar defendiendo y presionando en algunos momentos y, luego, cuando tengamos el balón, tenemos que explotar nuestras habilidades, tenemos calidad y velocidad... va a ser un partido abierto, en el que va a haber momentos en los que ellos van a tener posesión y habrá que estar organizados para recuperar", asegura Karanka, que sólo tiene palabras de elogio para los jóvenes villarrealenses. "Si al Racing ya lo veía complicado por la dinámica que traen del ascenso, al Villarreal más todavía, porque no sólo vienen de ascender, sino que tienen jugadores jóvenes, con experiencia en Europa y en Primera división y es un club que trabaja fenomenal. Si se suma esto a la dinámicia que veía en el Racing, está claro que va a ser un partido complicado", concluía.