La carrera por las elecciones presidenciales de la Real Federación Española de Fútbol ha comenzado. Varios candidatos ya se han postulado como posibles sustitutos de Pedro Rocha, quien ocupaba el cargo tras Luis Rubiales. Será un momento icónico para nuestro fútbol y que determinará el futuro del máximo organismo de este deporte en nuestro país. Para ello, varios elegidos que conforman la Asamblea General se tendrán que posicionar en base a las propuestas que realicen los candidatos.
Pedro Rocha terminó por convocar elecciones a la presidencia de la RFEF. Se celebrarán el próximo lunes 6 de mayo y para tales fechas, todos los candidatos deberán presentar su candidatura antes del próximo jueves 11 de abril. El domingo 14 finalizará el plazo para presentar recursos a estas. De no haberlos al día siguiente se hará la proclamación oficial y si se presentan esta se retrasará hasta el día 26.
La Asamblea General estará formada por varias personalidades dentro de nuestro fútbol: 19 presidentes de ámbito autonómico, 49 clubes (20 profesionales -11 de Primera y 9 de Segunda- y 29 no profesionales), 32 futbolistas (13 profesionales y 19 no profesionales), 11 árbitros (4 de Primera y Segunda y 7 del resto de categorías), 15 entrenadores (6 profesionales y 9 no profesionales), junto a 12 representantes de fútbol sala (5 clubes, 4 futbolistas, 2 entrenadores y 1 árbitro).
Entre esos entrenadores cabe destacar que figura Luis Enrique Martínez. El exseleccionador y actual entrenador del PSG forma parte de esta Asamblea junto a otros 14 entrenadores. Como profesionales, los otros cinco entrenadores que han sido elegidos para conformar la Asamblea son: Jesús Casas (seleccionador de Iraq), Gaizka Garitano, Sergio González, Pacheta y José Manuel Ochotorena. Por lo tanto, su voto determinará en parte el futuro de la RFEF. El que no estará entre los entrenadores elegidos será el exseleccionador femenino Jorge Vilda. Actualmente se encuentro a cargo de la selección de Marruecos femenina.
La salida de Vilda de la RFEF, que tenía un año más de contrato, se produjo después de que once componentes del cuerpo técnico de la selección, entre los que no estaba, pusieran sus cargos a disposición del organismo en apoyo a Jenni Hermoso y al resto de jugadoras tras los hechos protagonizados al acabar la final mundialista por Luis Rubiales, que se tocó los genitales en el palco de autoridades señalando, según afirmó, a Vilda y besó en la boca a la internacional.
Con toda la RFEF puesta patas arribas después de los escándalos en los que se ha visto envuelto el expresidente Luis Rubiales. La máxima del nuevo mandato será la de la transparencia, después de un año bastante triste por la corrupción existente en el máximo organismo de nuestro fútbol.