Bryan Gil está viviendo un auténtico calvario en el Tottenham Hotspur, donde cumple su tercera temporada, sin que haya conseguido responder en ningún momento a las expectativas que generó su fichaje en el verano de 2021, cuando los londinenses abonaron 25 millones de euros más variables y los derechos de Erik Lamela para el Sevilla FC.
En sus dos primeras campañas, el gaditano salió cedido en el mermado de invierno. Primero rumbo al Valencia, y el pasado curso de regreso al conjunto de Nervión, donde fue pieza importante en la conquista de la séptima Europa League.
Pero el pasado mes de enero, el extremo cambió de plan. Tuvo de nuevo ofertas para salir a préstamo, posicionándose el Feyenoord, la Fiorentina, el Brighton o la Real Sociedad. Pero no hubo acuerdo con ninguno de ellos. Con contrato en vigor con el club inglés hasta 2026, Bryan Gil se negó a salir si no era traspasado.
En este sentido, el periodista Fabrizio Romano, especializado en el mercado de fichajes, informa ahora que la idea de Bryan Gil de cara al próximo verano sigue siendo la misma. Aunque apenas juega (su última aparición fueron cuatro minutos ante el Everton el 4 de febrero), prefiere tomarse su futuro con calma y no está muy interesado en una nueva cesión.
A sus 23 años, y después de ver cómo el tren de la Eurocopa ha pasado de largo pese a ser muy del gusto de Luis de la Fuente, el extremo zurdo prefiere centrarse en el Tottenham, aunque es consciente de que será difícil revertir su situación, más aún se continúa el griego Ange Postecoglou como entrenador. La otra posibilidad que maneja, en realidad la que todos esperan, es salir traspasado a título definitivo si le presentan un proyecto importante.
De algún modo, este plan se puede entender como una medida de presión hacia su club para que facilite su marcha. En este sentido, su valor de mercado según Transfermarkt es de 16 millones de euros, pero los ‘Spurs’ los ‘Spurs’ exigían entre 7 y 8 millones de euros en la última ventana de transferencias.
Como ya informó ESTADIO, Bryan Gil le daría prioridad al Sevilla FC en caso de que el conjunto en el que se formó se decida a apostar de nuevo por él. Ni siquiera el hecho de no jugar competiciones europeas supone un problema, pero no será fácil que la entidad de Nervión pueda acometer su fichaje dada la delicada situación económica por la que atraviesa.
Mientras tanto, la Real Sociedad se mantiene a la expectativa, con la posibilidad de que pueda negociar el traspaso que desea el barbateño, el cual también es difícil que pueda asumir el Mallorca, otro de los equipos donde gusta. Lo que sí está claro es que, en caso de salir, su deseo es regresar a LaLiga.