José Antonio Rivero3 min lecturaIncreíble pero cierto. Según la información proporcionada por la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) a EFE, Irene Paredes no figuró en la convocatoria y ni siquiera se sentó en el banquillo por una razón absurda: un error informático. La defensora del FC Barcelona, que ya estaba completamente apta para jugar, según lo confirmó Montse Tomé en una conferencia de prensa previa al partido contra Suiza, se quedó fuera de la lista debido a un fallo en la aplicación de la UEFA, que cargó la misma convocatoria utilizada en el partido contra Italia, en la cual Irene Paredes no había sido incluida.
La RFEF intentó enmendar el error, pero lamentablemente ya era demasiado tarde para rectificar la situación, y Paredes no pudo disputar el partido. Este incidente no fue el único, ya que también se presentaron problemas en la alineación oficial. Amaiur Sarriegi, jugadora de la Real Sociedad, apareció en el banquillo a pesar de estar lesionada y no haber viajado a Zúrich tras el partido contra Italia.
Ivana Andrés y Mariona Caldentey, quienes estaban en el banquillo y a disposición del cuerpo técnico de Montse Tomé, tampoco figuraron en las alineaciones oficiales debido a un error de transcripción por parte del personal de la UEFA.
El error tuvo una consecuencia especialmente desafortunada para Irene Paredes, quien se perdió la oportunidad de jugar su partido número 100 con la selección. Esta cifra solo ha sido alcanzada por Alexia Putellas y Jenni Hermoso, lo que hace que este fallo informático sea aún más frustrante.
El insólito error informático que dejó fuera del partido a Irene Paredes no es baladí. La futbolista, campeona del mundo, fue una de las capitanas en la primera convocatoria de Montse Tomé en Oliva, la más rocambolesca que se recuerde. Se trata de una de las futbolistas históricas de la Selección y todo un seguro para el equipo, por su buen hacer en la parcela defensiva se ha convertido en una de las grandes bazas del combinado nacional.
El incidente es un recordatorio de cómo pequeños errores pueden tener un impacto significativo en el deporte profesional. A pesar de los intentos de la RFEF de corregir la situación, la falta de tiempo para hacerlo efectivo resultó en una oportunidad perdida para Irene Paredes.
El fútbol es un deporte lleno de emoción, sorpresas y, en este caso, un error informático que dejó a una talentosa futbolista sin la oportunidad de alcanzar una destacada marca en su carrera internacional. A pesar de este tropiezo, Irene Paredes seguramente continuará brillando en el fútbol y acumulando logros a lo largo de su carrera.