Antonio José Medina4 min lecturaSokratis Papastathopoulos ha sido el principal objetivo que, en estas dos semanas de parón, tenía el Betis para suplir la ausencia de centrales de aquí al mes de enero. Desde que se confirmara la lesión de Marc Bartra, el equipo verdiblanco valoró muy en serio la necesidad de incorporar un central del mercado de agentes libres, ya que se quedaba sólo con Chadi Riad y Pezzella para LaLiga y con el primero para los cuatro partidos de la Fase de Grupos de la UEFA Europa League.
Pero no hubo acuerdo con Sokratis, Almamy Touré crea muchas dudas por su amplio parte de lesiones y, por ahora, van a ir improvisando con lo que hay en el plantel y los jugadores de la cantera verdiblanca. La negativa del griego se debía a dos motivos. Por un lado su alto caché, ya que lleva semanas negociando con dos equipos de Arabia Saudí y Qatar, y aunque se rebajaba el sueldo con respecto a éstos, estaba pidiendo más de lo que el Betis está dispuesto a pagar. Y, segundo y principal, porque esperaba cerrar su fichaje con uno de los clubes más poderosos del mundo, el Bayern Múnich.
El equipo muniqués ha tenido muy mala suerte con las lesiones en este arranque de temporada. La lesión del francés Benjamin Pavard ya le creó problemas en esa zona y, justo antes del parón, casi al mismo tiempo de conocerse la grave lesión de Marc Bartra, el Bayern se encontró con que su problema se agudizaba. Dayot Upamecano se lesionaba en el último duelo y estará descartado entre cuatro y seis semanas.
A esos se añade un Matthijs de Ligt que, aunque ya se entrena, aún está falto de forma y no se puede arriesgar con él tras pasar cuatro semanas de baja por una lesión en la rodilla. Sólo el coreano Kim Min-jae está en condiciones de jugar.
El técnico del conjunto bávaro, Thomas Tuchel, ya tuvo que alinear hace unas semanas a una pareja de centrales formada por Noussair Mazraoui y Leon Goretzka en la DFB Pokal (Copa alemana) y está pidiendo insistentemente que le traigan un central, ya que tendría que improvisar ya desde mañana ante el Mainz 05.
El club barajó la opción de repescar a Jerome Boateng, que está sin equipo desde que dejó el Lyon a final de la pasada temporada. De hecho, el futbolista se entrena a diario en la ciudad deportiva del Bayern Múnich -la Sabner Strasse- mientras encuentra equipo y Tuchel está deseando su incorporación. Sin embargo, el club tiene dudas por los procesos judiciales por agresión que el central alemán tiene pendientes y, por ahora, no lo incorpora.
Ahí surge la alternativa de Sokratis Papastathopoulos, un jugador que Tuchel ya tuvo en el Borussia Dortmund y al que conoce perfectamente. Según Sky Sports, el griego sigue esperando una llamada que no llega mientras deja pasar oportunidades de encontrar equipo. El Bayern es un caramelo demasiado apetitoso por el que merece la pena esperar.