Jesús Mejías3 min lecturaSamuel Lino ha sido presentado como nuevo jugador del Atlético de Madrid. El extremo llega procedente del Gil Vicente de Portugal, liga en la que anotó 13 goles y repartió cinco asistencias el pasado curso futbolístico. Un extremo de tan solo 22 años de edad, joven, con mucha proyección y que no tendría hueco en estos momentos en la capital de España debido a que el Atlético ya tiene cubiertas las tres plazas de extracomunitarios.
El jugador tiene ganas de demostrar su calidad en el césped del Metropolitano, pero todo hace indicar que de momento su debut en liga con el equipo de Simeone tendrá que esperar. En su presentación afirmaba que “estoy feliz de estar en un gran club como en el Atlético de Madrid” y prometía esfuerzo y trabajo dentro del terreno de juego.
La salida de Lino, sobre todo para que vaya ganando experiencia en Primera división parece una realidad y ahí entra en escena el Cádiz Club de Fútbol. El futbolista ha sido ofrecido a la entidad gaditana para que recale cedido hasta final de temporada. Las relaciones entre ambos equipos son notables, prueba de ello es que Atlético de Madrid vaya a jugar de nuevo el Trofeo Carranza, y hace año y medio, Saponjic, delantero que no tenía minutos en el cuadro colchonero firmó una cesión de seis meses en la Tacita de plata.
Sin embargo, Samuel Lino tendría en el Cádiz el mismo problema que en el Atlético de Madrid y no es otro que las plazas de extracomunitarios que en estos momentos ocupan Santiago Arzamendia, Awer Mabil y Tomás Alarcón.
La salida más factible sería la de Santiago Arzamendia, el jugador ha sido relacionado com varios equipos sudamericanos como Independiente de Avellaneda, pero los argentinos no han llegado al mínimo que pedían los gaditanos para hacerse con la cesión del futbolista, que se ha demorado y ahora no parece tan claro que vaya a salir, pero en caso de interesar el jugador del Atlético, desde el club podrían presionar para que el futbolista saliera.
Distintos son los casos de Awer Mabil y Tomás Alarcón. En el caso del primero, acaba de firmar en propiedad con la disciplina gaditana y en el club hay muchas esperanzas depositadas en él. En el caso de Alarcón, y tras una primera campaña complicada por las lesiones y el habitual periodo de adaptación, se confía en que en su segundo año vestido de amarillo el jugador demuestre en nivel que lo ha llevado a ser internacional con Chile.