Jesús Mejías3 min lecturaSe avecina un mercado de fichajes bastante importante en el Cádiz Club de Fútbol. Los gaditanos se encuentran en puestos de descenso, son el equipo menos goleador del campeonato doméstico y afrontan el mes de enero con la necesidad de realizar algunas incorporaciones que le den un salto cualitativo a una plantilla cuya columna vertebral es la misma que la pasada campaña logró mantenerse en Primera división.
El primero en llegar será Raúl Parra, el lateral derecho ocupará la plaza del lesionado Joseba Zaldua, cuenta con el beneplácito de Sergio González y luchará de tú a tú con Iza Carcelén para ser titular en el segundo tramo de la competición. También se busca a un delantero, siendo el nombre de Toni Martínez del FC Porto el último en salir. Tampoco habría que descartar la incorporación de un centrocampista.
No solo habrá fichajes, también habrá salidas. La más sonada será sin lugar a dudas la de Lucas Pérez, el delantero gallego quiere salir para poner rumbo al Deportivo de la Coruña como ha reconocido el propio presidente del ecuador coruñés. Ya quiso salir en verano, el presidente Manuel Vizcaíno se lo impidió, y ahora todo apunta a que el ariete terminará el mes de enero viviendo en Galicia y jugando en Primera RFEF.
Podría no ser el único atacante en salir ya que en el club andaluz desean la salida de Álvaro Giménez. Un delantero con un alto salario, por el que se hizo un desembolso importante tras el ascenso a Primera división en 2020 pero que nunca ha terminado de cuajar. Ha estado cedido tanto el RCD Mallorca y en el Real Zaragoza, pero tampoco ha tenido grandes números en sus dos préstamos. Acaba contrato en junio, pero la intención del Cádiz es darle salida cuanto antes.
En el centro del campo dos bajas probables. Una de ellas es Antonio Blanco, un jugador que no cuenta con el respaldo de Sergio González. El pivote ha reconocido haberlo pasado mal psicológicamente, y el Getafe podría ser su destino. Por otro lado, Alarcón no termina de convencer, parece complicado que tenga minutos con regularidad y varios equipos de Italia se habrían interesado en él. Ninguno estuvo convocado para el partido ante la AS Roma que se saldó con un notorio triunfo amarillo.
Por último, Santiago Arzamendia. En Cádiz no están satisfechos con el rendimiento del jugador. Ya pudo salir el año pasado y los rumores con una posible marcha vuelven a resonar con fuerza. En su caso, al igual que en el de Alarcón sería con una cesión a no ser que hubiera un traspaso que cumpliera con las pretensiones gaditanas, algo poco probable.