El Betis debía realizar un traspaso en enero para cuadrar las cuentas y poder reforzar la plantilla como finalmente hizo con la llegada de hasta cuatro jugadores, casos de Johnny, Chimy Ávila, Bakambu y Pablo Fornals. La dirección deportiva disponía de varias opciones, pues había propuestas por varios futbolistas, pero, finalmente, se decantó por la más firme y suculenta con el traspaso de Luiz Henrique a Botafogo, propiedad del empresario John Textor, también dueño, entre otros del Olympique de Lyon.
La venta se cerró en 16 millones fijos más cuatro en variables en lo que se considera una buena operación en el Benito Villamarín en lo económico, a costa de perder verticalidad en el costado diestro. No obstante, en su lugar trajo a Fornals, un perfil diferente, pero más que contrastado y con unas cualidades que se ajustan a lo que buscaba Pellegrini. De hecho, desde su llegada es titular indiscutible.
No obstante, es lógico que el beticismo piense en algún momento en que se trató de un error desprenderse del brasileño o que en el club pueda haber cierto arrepentimiento puntual, sobre todo cuando el de Petrópolis realiza exhibiciones como la de la pasada madrugada en la Fase de Grupos de la Copa Libertadores, cuando marcó un auténtico golazo en la victoria en casa ante el Universitario peruano por 3-1.
El ex bético anotó el 2-0 en el minuto 57 con una maniobra magnífica. Y es que, tras un robo en campo rival de su equipo, el balón le llegó a Luiz Henrique, que encaró al meta y lo regateó con una asombrosa pisada sentarlo y marcar a puerta vacía. La diana se ha hecho viral y el propio extremo comentó su maravilla en redes con un comentario polémico y un poco al límite en referencia al regate que le hace a Britos. "Tú ve por allí, que yo voy por aquí, ¿vale? El primero de muchos con la tradicional estrella en el pecho", señaló en forma de mofa el atacante, que empieza a ver la luz en su regreso a Brasil, pues una lesión le frenó tras su llegada.
De hecho, en su segundo partido sufrió una lesión en el gemelo izquierdo que le ha obligado a perderse una decena de partidos, reapareciendo el 31 de marzo. Así, el de esta madrugada ha sido su primer tanto y ha sido poco menos que espectacular con una acción propia de un futbolista con mucho talento.