Posiblemente tenga que interrumpir su contrato con el Trabzonspor, que le firmó hasta 2025, por la gran deuda que acumula el club turco, superior a los 15 millones de euros, lo que le obligará, para cumplir con el 'Fair Play Financiero', a deshacerse de algunas de sus fichas más altas. A sus 32 años, Marc Bartra está destacando en la SüperLig y el resto de competiciones con los azulgranas, anotando tres goles en 32 partidos, los últimos jugados con máscara para proteger su tabique nasal tras una aparatosa lesión. Pero, si bien intentarán venderle el próximo verano, su ya prohibitivo sueldo y los escasos 1,5 millones (con bonus) que costó posiblemente aceleren una rescisión que, según algunas fuentes, le acercaría de nuevo al Real Betis.
Según ha podido saber ESTADIO Deportivo, el nombre del catalán estaba sobre la mesa de Cordón para, como ocurriera con Pezzella, obrar una 'operación retorno' que, en esta ocasión, debería ser a coste cero y con el ex culé adaptando su salario a las posibilidades heliopolitanos, acaso retomando aquella negociación para renovar que se enquistó. No había ni hay resquemor alguno con Marc, a quien se valora la predisposición para liberar un buen pellizco y otorgar margen de maniobra a la entidad cuando se complicó el asunto de las inscripciones en LaLiga el pasado verano. Ahora, con Ramón Planes al frente de la planificación, se le va a dar una vuelta al asunto, porque la prioridad de los rectores heliopolitanos sigue siendo la del rejuvenecimiento del plantel, por lo que se estudiarán otras vías igualmente interesantes.
Sin descartar a Bartra, el Betis sigue vivo en la intensa pugna por el central zurdo franco-camerunés del Eintracht Evan Ndicka (23), que queda libre, pero al que pretende media Europa, con la idea de cubrir la plaza que dejará un Víctor Ruiz que acaba contrato con un efectivo de garantías que luche con Pezzella, Luiz Felipe y Edgar por la titularidad. En principio, una inversión en esa zona está descartada, salvo oportunidad de mercado o venta del italo-brasileño, con mucho mercado en la Premier League y unas grandes posibilidades de generar plusvalías, ya que llegó libre. En este último caso, llegarían dos centrales: alguien más curtido y una apuesta, entrando los verdiblancos en la subasta, todavía en forma de seguimientos, por Saúl Coco (24).
Internacional por Guinea Ecuatorial, el país de su padre, tiene la doble nacionalidad, pues nació en Arrecife, capital de Lanzarote, de madre española, aunque su abuelo paterno era de Nigeria. La fusión ha deparado un central de 1,88 que se puede desenvolver con fluidez como pivote, ya que es elegante en la salida y tiene criterio, aparte de agresividad en la marca y velocidad para la anticipación. Con contrato hasta 2025 en la UD Las Palmas, se formó en las categorías inferiores amarillas, aunque probó suerte en las del Espanyol, uno de los clubes que, ahora, desea recuperarle. Sevilla, Atlético de Madrid, Osasuna y Villarreal han apuntado, igualmente, su nombre en sus agendas.