Víctor Camarasa se desvinculaba del Real Betis este miércoles y, sobre la bocina, el Oviedo lo anunciaba como fichaje invernal hasta final de temporada. No fue el adiós que el centrocampista valenciano hubiera deseado después de cinco años y medio como bético, pero al que las lesiones le han llevado.
Hace poco más de un mes regresaba a los terrenos de juego en el Betis-Atalanta. Eran sólo unos minutos, pero con ellos ponía fin a dos años de calvario. Su intención era quedarse y aportar, pero sabía que no tenía sitio en el equipo, que tal vez habría tenido un hueco si Paul salía en dirección al Espanyol, pero que lo mejor para él era dar un paso atrás y buscar un equipo que le dé confianza y minutos, que es lo que necesita para recuperarse de sus largas lesiones.
El jugador, incluso, intentó encontrar un club que le dejase algo de dinero al Betis en agradecimiento por haberlo renovado la pasada campaña, aunque la mejor oferta que le llegó fue la del Oviedo.
Camarasa no se pudo despedir, pero tras dos días lo ha hecho, con una carta dirigida al Betis y a los béticos, en la que muestra el cariño que deja en este club y la huella que el Betis le ha dejado a él. Ya el propio Betis se despidió ayer del valenciano deseándole lo mejor.
Ésta es la misiva que Víctor Camarasa ha publicado en sus perfiles de redes sociales:
Béticos, ha llegado el momento de la despedida. Estos últimos años han sido complicados, pero a la vez enriquecedores personalmente. He aprendido a valorar los pequeños detalles, los gestos y el cariño de quien ha estado a mi lado en todo momento. He disfrutado de la grandeza de este club y de su afición.
Os llevaré en el corazón Siempre. Pese a todo lo que he pasado, a lo que he sufrido por las lesiones, me siento un privilegiado. Tengo mil recuerdos, pero quedo con uno: el título de Copa y la celebración, de la que me hicisteis partícipe como al que más. Muletas en mano. Entonces me emocioné y ahora aún lo hago.
Os estoy eternamente agradecido y os deseo lo mejor. Del mismo modo que empiezo esta nueva etapa con ganas de disfrutar al máximo de lo que más me gusta y de dar mi mejor versión sobre el césped. No pararé hasta conseguirlo.
¡Mushho Betis!
¡Hasta siempre, familia!