Adama Traoré, Carles Pérez... Ez Abde sería una alternativa o, en el mejor de los casos, competencia de Juanmi y Ayoze en la banda izquierda, pero los catalanes están mucho más acostumbrados a partir desde la banda derecha, el hispano-maliense en su perfil natural, desbordando con diagonales aunque también por fuera, y el de Granollers, a pierna cambiada, como vienen haciéndolo en el Real Betis Luiz Henrique, Rodri y Canales (antes, Lainez también). Manuel Pellegrini gusta de dejar los carriles enteros para los laterales y situar a sus extremos a contrapié para percutir por dentro, amén de generar superioridades y asociaciones en los canales interiores. Es por eso que los dos primeros nombres apuntados, corroborados y confirmados como sondeos de Ramón Planes este verano, obedecen a un cambio de escenario detectado por los técnicos y/o a una jugada de cobertura para posibles 'fugas' en el costado diestro del ataque.
De un lado, la grave lesión de Nabil Fekir, según los expertos consultados en su día por ESTADIO Deportivo, le mantendrá fuera de los terrenos de juego alrededor de nueve meses, por lo que no se le espera antes de noviembre. Desde que empiece LaLiga 23/24 hasta que el francés se ponga en forma, sin Joaquín ya en la ecuación, el 'Ingeniero' deberá reubicar en la posición de '10' a sus mejores cerebros, el cántabro y el extremeño, con lo que el perfil en el que más solían actuar quedaría 'cojo', con el brasileño y si acaso Aitor Ruibal, que el chileno prefiere como recambio exterior pero en defensa o, a lo sumo, también partiendo desde el costado siniestro. El Betis, en cualquier caso, busca desborde y velocidad, porque tampoco las tiene todas consigo acerca de la continuidad del MVP de los dos primeros partidos de España en el Europeo sub 21 y del ex de Fluminense.
Las grandes actuaciones de Rodri están incrementando el 'hype' en torno al mediapunta, que colecciona elogios y empieza a aparecer con fuerza en los mentideros futbolísticos. El Nápoles lo tiene anotado en su agenda, pero se esperan más movimientos, los primeros contactos y llamadas. Con una cláusula aceptable para un futbolista de su calidad (40 millones de euros) y con tan sólo 23 años, recién cumplidos además, se presenta como una oportunidad de negocio evidente, habida cuenta de que prácticamente todo lo recaudado sería plusvalía al llegar a coste cero a Los Bermejales en 2016. Por otra parte, resulta más complicado obtener ganancias con Luiz Henrique (el 85% de su pase costó 8+4,6), pero, pese a sus altibajos durante la temporada de su debut en Europa, el mismo conjunto partenopeo, el Newcastle y el Aston Villa anotaron su nombre cuando descolló allá por el mes de enero de 2023. Su agente y otros intermediarios de confianza lo mueven por la Premier, donde más se paga, y podría haber alguna sorpresa para la que el Betis quiere estar preparado.