Los problemas económicos se aglutinan sobre la mesa del Barcelona. El último varapalo para la directiva de Laporta llega en forma de multa procedente de la UEFA después de que el TAS desestimase el recurso que presentó el club blaugrana ante la sanción económica de la entidad futbolística europea. Dicha multa impuesta por la UEFA se debe a que el Barcelona declaró erróneamente el ejercicio de cuentas del 2022. El conjunto blaugrana expuso beneficios por la enajenación de activos intangibles (distintos de traspasos de jugadores) que no son ingresos relevantes según la normativa. Es por ello que la cifra de la sanción de la UEFA que deberá pagar el Barcelona es de 500.000 euros.
La UEFA no reconoce como ingresos relevantes los procedentes de la venta de los derechos de televisión que el club hizo en 2022, cuando activó la primera 'palanca' para recuperar su solvencia económica, y la primera cámara del órgano de Control Financiero de Clubes (CFCB) sancionó al club en julio de 2023. Tras evaluar los ejercicios 2019, 2020, 2021 y 2022, la cámara concluyó que el club violó intencionadamente su normativa, al reportar como ingresos relevantes los procedentes de la venta de derechos audiovisuales, por importe de 267.089.000 euros, correspondientes al periodo de presentación de informes que finalizó en 2022. La venta comprende el 10% de los derechos televisivos del club relacionados con el campeonato nacional español durante un periodo de 25 años, según precisa el fallo del TAS. Es por ello que el Barcelona deberá hacer frente a la multa y pagar 500.000 euros tras la sanción impuesta por la UEFA.
Esta sanción llega en el peor momento para Laporta. Las cuentas traen por la calle de la amargura al presidente del Barcelona al que varios grupos han pedido explicaciones por las pérdidas con las que se cerró el año 2023. Los citados grupos de socios recuerdan a Joan Laporta, que empieza a estar sentenciado en el Barcelona, que las cuentas de la pasada temporada se han cerrado con unas pérdidas de 91 millones de euros y "con una irregularidad" destacada por los auditores a causa de "una incorrecta formulación contable, susceptible de poder generar responsabilidades a futuro", a causa de unos beneficios registrados sobre 'Barça Vision' (208 millones) "imputados a las cuentas y que no se ajustan a la realidad". Desde la formación de las nueve entidades no se fían de Laporta que vuelve a estar en el ojo del huracán.