Alvaro Arenillas4 min lecturaBernardo Silva y Dani Olmo no tienen pensado cerrar la puerta. Aunque ambos jugadores llevan un par de años pudieron salir de sus respectivos equipos sin que finalmente se diese, tienen claro que no por ello van a dejar pasar la oportunidad –si les presenta–. Por ello, y según informa Mundo Deportivo, los dos han incluido en sus nuevos contratos una cláusula de rescisión pensando en una posible salida al FC Barcelona el próximo verano.
Así es. Aunque en el mercado concluido hace días era imposible que el Barça les fichase –a duras penas han inscrito a los que ya estaban–, ello no quita que la entidad de la Ciudad Condal tenga marcado el nombre de ambos en rojo. Dentro de la planificación a medio plazo son dos objetivos que siguen encima de la mesa y que parecen convencidos de poner de su parte para vestir de blaugrana.
Empezando por Bernardo Silva, este se había negado a renovar en anteriores ocasiones, y según informa el citado medio solo lo hizo finalmente al conocer que la situación económica del Barcelona hacía imposible que su fichaje se produjese en 2023, y eso que era el más deseado por Xavi Hernández. Así, optó por firmar un nuevo contrato por una sola campaña (ahora concluye el 30 de junio de 2026), y lo que es más importante, rebajando ostensiblemente su cláusula de rescisión. Para ser exactos, los citizen pedían por su excelso futbolista entre 80 y 100 millones de euros, mientras que ahora la su libertad queda fijada en 58,5 millones de euros (50 millones de libras).
Contando ya con 30 años, en el Barça saben que no pueden dilatar mucho más su fichaje. Sin ir más lejos, este verano pidieron una cesión gratuita con una obligación de compra para el próximo verano por 50 millones de euros. El Manchester City, teniendo en cuenta lo importante que es para Pep Guardiola, no aceptó.
El caso de Dani Olmo es parecido, solo que este cuenta con solo 25 años, por lo que se ve como una inversión más rentable a priori. El extremo también ha renovado con su club, el RP Leipzip, para ampliar su vinculación hasta el 30 de junio de 2027. En cuanto al coste que tendría contratarle, este ha fijado su cláusula de rescisión en 60 millones de euros.
Siendo también del gusto de Xavi, se trata de un polivalente atacante que puede ocupar los tres puestos de arriba, justo lo que el técnico demanda en las incorporaciones para su ataque. En cualquier caso, su fichaje no será nada sencillo, ya que tiene a otros equipos tras él, incluyendo al propio City, el cual le ve como una buena opción para sustituir justo a Bernardo Silva.