Fernando Ruiz5 min lecturaNo está pasando por su mejor momento Rodrigo Riquelme. El extremo del Atlético de Madrid empezó la temporada teniendo bastante protagonismo con Diego Pablo Simeone pero desde mitad de temporada, concretamente desde diciembre, el madrileño prácticamente ha desaparecido de las alienaciones en LaLiga, habiendo jugado tan sólo 15 minutos desde la jornada 15. Pese a todo, el canterano sigue trabajando día a día para revertir su situación y en un reciente documental para el que se ha prestado con el 'streamer' Adri Contreras, el futbolista ha compartido 24 horas de su vida dejando detalles muy curiosos.
Entre ellos, desvela cómo es Antoine Griezmann en el día a día. "Es un tío especial. Para ser quien es, es un chico supernatural, siempre está sonriendo a todo el mundo, buenos gestos... Creo que es un claro ejemplo en el que la gente se tiene que fijar porque él es así. Lo que hace y expresa es porque lo siente. Yo he pasado de estar en la cantera, de verle y de que sea mi ídolo en ese momento, a compartir vestuario con él y poder hablar de lo que sea", contó Riquelme sobre el galo.
Además, el extremo ha contado una anécdota que vivió con Griezmann y que nunca olvidará: "Él tuvo un gesto conmigo que no sé si recordará pero a mí no se me va a olvidar nunca. Yo, después del partido contra el Inter de Milán, fallé una ocasión muy clara y fuimos a los penaltis. Me acuerdo de que al día siguiente me envió un mensaje diciéndome que había que tener los huevos muy grandes para, después de haberlo fallado, tirar el penalti como lo hice. Que iba a fallar un montón de ocasiones más, pero que lo importante es que siga creciendo, que me quería mucho y que confiaba en mí. Para mí fue un mensaje que jamás se me va a olvidar", desveló Riquelme.
El futbolista también ha dado detalles de cómo es trabajar bajo las órdenes de Diego Pablo Simeone. "Es exigente, eso es fundamental para que consigamos el rendimiento que nos exige", reconoció Riquelme que también habló de su decisión de salir cedido al Girona: "Antes de irme cedido al Girona yo tuve una charla con él clave. La sentí como de padre a hijo. Míchel me ayudó mucho a mejorar y a animarme, a dar pasos hacia adelante. Le estoy agradecido de por vida".
En un momento del documental, Riquelme se confiesa con Adri Contreras llegándole a contar que estuvo a punto de dejar el fútbol antes de llegar al mundo profesional. "Yo venía de un año a nivel mental muy malo en mi último año de juveniles. El entrenador que teníamos no era un buen tipo y te hablo como persona. No era muy buena persona y nos hizo mucho daño a algunos de los que estábamos en ese equipo. Yo quise dejar de jugar", admitió.
Al final, sus padres le ayudaron para seguir. "Mi padre me dijo 'termina la temporada, disfruta de tus compañeros que son amigos tuyos, y cuando termine el curso llamo yo al club y le digo que no juegas más'", relató, pero poco después recibió la llamada del primer equipo para hacer la pretemporada y todo cambió: "Pedro Pablo, el delegado del primer equipo, me dijo que iba a hacer la pretemporada con ellos. El míster (Simeone) quería que estuviese con ellos. Fueron pasando los días y volví a recuperar esa esencia del fútbol, de disfrutar, de estar con mis compañeros y sentirme importante y valorado".