Álvaro Morata está concentrado con España en la Selva Negra alemana, alejado de todo el ruido posible sobre su futuro y solamente enfocado en intentar levantar la cuarta Eurocopa con la Selección Española. Sin embargo, en España, es inevitable que el mercado de fichajes siga sus derroteros y ello implica directamente al delantero madrileño.
Sobre todo porque él mismo ha reconocido que no es ajeno del todo a esos rumores y noticias que aparecen donde el Atlético de Madrid busca reforzar su delantera, con el nombre de Artem Dovbyk como claro favorito. "Supongo que lo que sale en prensa, será lo que están hablando ellos (el Atlético de Madrid). Así de claro te lo digo. No he hablado con ellos. Si veo que el Atleti quiere fichar a ocho delanteros, me imagino que no soy la prioridad del club. No puedo quedarme en el Atlético para no jugar y para no ser prioridad", afirmaba Morata días antes de su debut en la Eurocopa, una versión en la que ha insistido incluso días después.
Lo cierto y verdad es que su futuro está en el aire. En el Atlético de Madrid cuentan con Samu Omorodion para la próxima temporada, y en caso de acabar cristalizando la operación por Artem Dovbyk, aunque también gusta Alexander Sorloth, alguno tendría que salir y todo apunta al madrileño. De hecho, desde Italia no han tardado en volverlo a vincular con la Juventus de Turín, club en el que ha jugado en dos etapas diferentes, hacia el que Morata guarda un cariño especial y ciudad en la que todavía tiene una vivienda en propiedad, aunque también ha sido relacionado con la Roma.
Por eso, la idea de jugar en el Getafe de la que alguna vez ha hablado en público y en privado, parece que tendrá que esperar, pues es algo que le gustaría para el tramo final de su carrera. El propio presidente del Getafe, Ángel Torres, se refería a ello en la presentación de las nuevas camisetas del club azulón.
"El chico tiene dos años con el Atlético y está a gusto. No tengo noticias. Hace dos o tres meses que no hablo con él. Creo que se va a quedar en el Atleti", reconocía Ángel Torres, que sueña con la vuelta de Morata al Getafe, en el que ya jugó en su etapa como cadete. Lo ideal para el club del sur de la Comunidad de Madrid es que pudiera llegar como agente libre cuando acabara su contrato en el Atleti, en el verano de 2026 y todavía con 33 años, una edad en la que todavía puede rendir al máximo nivel.