José Antonio Rivero5 min lecturaEn un verano que ha transcurrido sin estruendosos fichajes, salvo la incorporación de Iñigo Ruiz de Galarreta, el Athletic Club ha encontrado en su cantera y en los jugadores que regresan de cesiones una fuente de emoción. Entre todos ellos destaca uno que ha brillado con luz propia y ha capturado la atención y confianza del entrenador Ernesto Valverde. Unai Gómez se ha convertido en la grata revelación de la pretemporada y ha demostrado su valía en diversos encuentros.
El momento culminante llegó con un gol memorable frente al Celtic en tierras escocesas. Una recuperación tras una presión intensa, un control hábil y un potente zurdazo desde fuera del área. Ese fue su primer gol vistiendo la camiseta del primer equipo, un hito que quedará grabado en su joven carrera.
La actuación destacada en Escocia no hizo más que confirmar lo que se venía vislumbrando en las semanas previas. Unai ya había tenido oportunidad de entrenar con el primer equipo durante la recta final de la temporada pasada y había figurado en varias convocatorias, aunque aún no había tenido la oportunidad de debutar. Valverde quedó cautivado por su destreza física y su inteligencia dentro del terreno de juego, aunque en aquel momento parecía improbable que ganara un papel significativo en el equipo. Sin embargo, apenas unos meses y cuatro partidos amistosos después, las perspectivas han cambiado drásticamente. Ahora parece lejana cualquier idea de apartar a Unai Gómez de Lezama en esta temporada.
El joven talento está dejando una muy grata impresión con su desempeño, y su capacidad para adaptarse y sobresalir en el escenario del primer equipo ha sorprendido gratamente a todos. La pretemporada ha sido su oportunidad para demostrar su valía y ha sabido aprovecharla al máximo. Las expectativas para su futuro son prometedoras y parece que Unai está listo para asumir un rol más protagónico en el Athletic Club. Su determinación y calidad están generando un sentimiento de optimismo entre los aficionados y el cuerpo técnico, que ven en él un futuro brillante dentro de las filas del equipo.
"Es un futbolista que tiene juego, que puede jugar en varias posiciones y además llega al área. Nos hacen falta este tipo de futbolistas que tengan tiro y disparo. Es un jugador fuerte, nos puede ayudar. Ya veremos el recorrido que tiene", ha dicho de él Valverde este verano.
Unai Gómez y Adu Ares son los dos únicos jugadores del filial que se han mantenido en el primer equipo, de los muchos con los que el Athletic comenzó la pretemporada. El de Bermeo seguirá con su ficha del filial este año, aunque se antoja que estará mucho con el primer equipo.
Con contrato hasta el próximo 30 de junio de 2024 y una cláusula de rescisión de diez millones de euros, en el Athletic están tranquilos con el futuro de su joven promesa, de tan solo 20 años. Según El Correo, el conjunto vasco tiene la opción de extender el contrato de Gómez de manera automática dos temporadas más, por lo que la hipotética idea de que se marche gratis el verano que viene queda descartada.
Otra cuestión es su cláusula, baja para cualquier equipo extranjero e incluso para los de LaLiga. Pese a esa opción de prorroga unilateral de su contrato, si Unai muestra esta temporada lo que se espera de él, jugador y club se sentarán para mejorar su situación y darle una ficha del primer equipo, una negociación que incluiría un aumento de su cláusula de rescisión.
De momento, Valverde parece haber encontrado otro 'cachorro' al que soltar con los leones grandes este curso para ver de qué es capaz.