Cataluña prohibe la venta de Conguitos por las quejas de racismo

El bar del Parlamento catalán ha dejado de vender estos míticos productos de chocolate debido a las quejas de un cliente

Cataluña prohibe la venta de Conguitos por las quejas de racismo
Cataluña prohibe la venta de Conguitos por las quejas de racismo - ED
José Antonio RiveroJosé Antonio Rivero 3 min lectura

Los bares y las cafeterías que están dentro de edificios públicos como el Senado, el Congreso o los distintos Parlamentos y Ayuntamientos suelen sorprender al resto de los ciudadanos que no lo frecuentan por sus bajos precios.

Recordado por todos es lo ocurrido en 2007 con el entonces presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, quien fue preguntado por el precio de un café y dijo que "unos 80 céntimos", muy lejos de precio real. Otro ejemplo es lo que se supo a principios de año que gastaba el Ministerio de Trabajo y Economía Social, presidido por Yolanda Díaz, en la compra de dulces y bollería como churros, croissants o napolitanas, costando al Ministerio 68.000 euros.

Otro suceso peculiar ha ocurrido recientemente con la comida en el bar de un edificio público, concretamente el Parlamento de Cataluña. En dicho local se ha dejado de vender la popular chocolatina de la marca Conguitos por ser considerado un producto racista.

Al parecer, un cliente se quejó de dicho producto y de la apología del racismo que, según este cliente, hace, tanto en su nombre como en su color. La venta de estos chocolates ha sido sustituidas por otros como KitKat o Toblerone.

Josep Rull, presidente del Parlamento de Cataluña, ha salido al paso de dicha noticia debido al revuelo montado. "El Parlament no ha prohibido nada, ni el plan de igualdad afecta a la venta de Conguitos en el bar. Que no se venda este producto es decisión del bar, no del Parlament. Un cliente, que no era ni político, hizo un comentario hace un tiempo sobre si era adecuado vender este producto. El responsable del bar, cuando acabó las existencias que tenía, ha decidido de momento no vender más Conguitos", afirma.

Por oro lado, el dueño del establecimiento de restauración, según publica El Mundo, ha comentado que retiró el producto citado por miedo a una campaña en contra del bar, no por obedecer a algún cargo político concreto.

Una polémica que no es nueva

No es la primera vez que los Conguitos son relacionados con el racismo. Ya en 2020, incitado por una campaña en Change.org debido al movimiento 'Black Lives Matter', la marca, que desde 1987 pertenece al grupo Lacasa, planteó un rediseño de su marca para evitar ese estigma racista.

Nada queda en los paquetes de chocolates de la caricatura que antes salía, queriendo evitar así cualquier tinte racista. Además, hoy en día existen Conguitos de muchos sabores, no sólo negros.

En la propia web de la marca se indica que "su imagen ha ido evolucionando con el tiempo".