Elon Musk, uno de los hombres más ricos del mundo, decidió hace no mucho comprar la red social Twitter por 44.000 millones de dólares, un dineral que ni siquiera los expertos entendieron. Desde que el fundador de Tesla se hizo con la red social del pajarito azul no ha parado de hacer cambios, siendo su última medida una de las más polémicas.
Hace unos días se veía como todos los perfiles de Twitter perdían el símbolo de verificación azul, el cual aparece junto al nombre de usuario y sirve para identificar cuentas oficiales y evitar fraudes. No todo el mundo podía acceder a él, tenía que ser alguien de cierta relevancia para conseguirlo. Ahora Musk ha decidido quitárselo a todo el mundo y que cualquiera pueda tenerlo, siempre y cuando pase por caja.
Todo aquel que quiera tener un perfil verificado en Twitter puede conseguirlo pagando ocho dólares al mes, casi diez euros.
Algunos clubes de LaLiga han decidido pagar para recuperar el tick azul, algo que han hecho Betis y Sevilla, no así el Cádiz, al menos de momento.
Sergio Ramos también fue muy crítico con la decisión de Elon Musk, aunque el camero sí que ha pasado por el aro y ha pagado para mantener la verificación.
"Elon Musk, eliminar las insignias azules, forzar pagos y ganar dinero es una estrategia. Eliminar el odio, promover el respeto y hacer de Twitter un lugar mejor podría ser otra. Digo…", escribió Ramos en una publicación que acompañó con imágenes de otros usuarios lanzándole mensajes violentos.
Son muchas las personalidades que se han negado a pagar y han perdido su verificación, uno de ellos el jugador de Los Angeles Lakers LeBron James. "Bueno, supongo que mi azul desaparecerá pronto porque, si me conoces, sabes que no voy a pagar", escribió LeBron.
Poco después se conoció que LeBron es una de las personas que Musk ha elegido para que directamente Twitter le pague la verificación, manteniendo el tick azul al lado de su nombre.
Las otras dos personalidades que corren con la misma suerte son Shatnet y Stephen King, este último también afirmó que no pagaría por 'Twitter Blue', como se llama ahora la verificación.
Hay que destacar que 'Twitter Blue' no sólo aporta la verificación del perfil, también permite editar los tuits, publicar con un máximo de 10.000 caracteres y conseguir que el algoritmo impulse las publicaciones.