Georgina Rodríguez está de vuelta. La española, pareja de Cristiano Ronaldo, estrena nueva temporada de su documental en Netflix, lo que la tiene acaparando titulares y portadas en la prensa del corazón. "Esta es Georgina Rodríguez: madre, influencer, empresaria y pareja de Cristiano Ronaldo. Un retrato emotivo y exhaustivo de su vida cotidiana", dice la descripción de la plataforma de streaming sobre el documental de Georgina, que ha logrado grandes datos de audiencias en sus dos temporadas anteriores y que espera repetir éxito en esta tercera y nueva entrega.
El 18 de septiembre fue la fecha de estreno de 'Soy Georgina', que en esta temporada mostrará, entre otras cosas, la llegada a Arabia Saudí tras el fichaje de Cristiano Ronaldo por el Al Nassr o el debut de la española como modelo en la semana de la moda de París. Pero detrás de todo está, para sorpresa de muchos, Rafa Nadal.
La productora encargada de grabar y vender a Netflix la docuserie de Georgina Rodríguez es Producciones Komodo, empresa de la que el tenista Rafa Nadal posee el 50 por ciento, teniendo como socio empresarial a Abel Matutes.
Dicha productora se ha especializado en este tipo de producciones con celebrities, habiendo realizado también 'Tamara Falcó: La Marquesa', el documental de María Pombo en Amazon Prime Video o el de la baronesa Thyssen. Incluso estuvo presente en el Santiago Bernabéu para la presentación de Kylian Mbappé con el Real Madrid.
La influencer de Jaca ha sabido sacar mucho provecho de su docuserie, que ha sido todo un éxito en la pequeña pantalla. Georgina habría ingresado diez millones de dólares por la primera temporada del programa, por lo que se entiende que por la segunda habría ganado, mínimo, lo mismo.
Además de estos 20 millones de dólares ganados con las dos primeras temporadas de 'Soy Georgina', la española tiene junto con Cristiano Ronaldo una empresa de implante capilar, la cual factura más de diez millones de euros al año. Las redes sociales, donde tiene cerca de 70 millones de seguidores, es su otro gran negocio, gracias a las cuales cierra importantes campañas publicitarias.
A todo esto habría que sumar lo que Georgina ganará con la tercera temporada de su docuserie, que probablemente sea más que con las dos anteriores. Un patrimonio que no llega a igualarse con el del futbolista portugués, pero que no tiene nada que envidiarle.