José Antonio Rivero3 min lecturaEn este 2023, la vida de Joana Sanz ha estado marcada por desafíos significativos que han puesto a prueba su fortaleza emocional. A comienzos de año, la modelo se enfrentó a dos golpes devastadores: la triste pérdida de su madre y la complicada situación de su esposo, Dani Alves, quien se encuentra en prisión debido a una presunta agresión sexual en una discoteca de Barcelona. A pesar de estos reveses, Joana ha demostrado resiliencia al intentar reconstruir su vida en medio de la adversidad.
Durante estos difíciles momentos, la modelo buscó apoyo y consuelo en su círculo cercano de amigos. La importancia de contar con un sistema de apoyo sólido se ha convertido en un pilar fundamental para Joana mientras enfrenta las complejidades de su realidad. La capacidad de rodearse de amigos que la respaldan ha sido esencial para sobrellevar la carga emocional que estas circunstancias inesperadas le han impuesto.
A medida que los meses han transcurrido, Joana Sanz parece haber encontrado cierta estabilidad emocional. A través de sus redes sociales, específicamente en Instagram, ha compartido momentos íntimos con sus seguidores, permitiéndoles un vistazo a su vida y a su proceso de recuperación. Recientemente, la modelo decidió interactuar de manera más directa con su audiencia a través de la función de preguntas en Instagram Stories.
Bajo el título "Hoy es el día del soltero. Me voy a copiar unas preguntas", Joana invitó a sus seguidores a participar en una encuesta que abordaba cuestiones personales y comprometidas. Preguntas como "¿Te han sido infiel?", "¿Has sido infiel?", "¿Te liarías con alguien de una noche?" y "¿Te has liado con alguien sabiendo que tiene pareja?" fueron lanzadas al público.
En un giro sorprendente, Joana Sanz no solo formuló estas preguntas, sino que también se dispuso a responderlas con sinceridad. Reveló que dos de sus tres parejas anteriores le fueron infieles, pero enfatizó que ella nunca había sido infiel. Ante la pregunta de si se había liado con alguien en una noche, respondió con un firme "Never (nunca)". Además, compartió una confesión más íntima al admitir que había dado "un par de besitos a modo estudio de mercado para ver qué tan inservibles son".
Después de abordar estas preguntas íntimas, Joana Sanz concluyó su interacción con un mensaje claro para sus más de un millón de seguidores en Instagram: "Focus on me (Centrada en mí)". Este mensaje refleja su determinación de centrarse en su propio bienestar y continuar su proceso de sanación y crecimiento personal, recordándonos a todos la importancia de cuidar de nosotros mismos incluso en medio de las adversidades.