Fue, sin lugar a dudas, el equipo revelación de la primera vuelta de LaLiga esta temporada, aunque el cambio de año no ha sentado nada bien al Rayo Vallecano, que no conoce el triunfo en el torneo de la regularidad (un empate frente al Betis, además de cuatro derrotas contra Atlético de Madrid, Athletic Club, Celta y Osasuna) y se ha consolado pasando rondas en la Copa del Rey (dejó en la cuneta a Mirandés, Girona y Mallorca). En la tabla, ya paga esa 'normalización' de los resultados descendiendo hasta la zona media, a cuatro puntos ya de Europa, mientras que en semifinales del torneo del K.O. tiene complicado jugar el partido decisivo del próximo 23 de abril en La Cartuja, ya que deberá remontar el 3 de marzo en el Benito Villamarín el 1-2 de la ida.
Sin embargo, no es sólo lo deportivo lo que está minando al cuadro franjirrojo. La guerra interna entre su presidente, Raúl Martín Presa, y un sector de la afición, representado por el grupo ultra 'Bukaneros', se ha recrudecido, hasta el punto de que la citada peña abandonó Vallecas en la última jornada ante los navarros por los intensos cacheos y registros de la Policía a la entrada del campo, pues la entidad había prohibido cualquier insignia o identificación relativa a la misma. Una tensión que se ha vuelto insostenible y que afecta a los profesionales. El capitán, Óscar Trejo, ya avisaba tras vencer a los baleares en cuartos de Copa que "la situación no es la adecuada entre la afición y la directiva", por lo que instaba a una paz que no ha llegado. "La gente sabe que estamos a muerte con ellos y lo vamos a seguir estando porque lo que hacen es impresionante. Hay que intentar que se solucione pronto todo", señaló el atacante.
El 0-3 ante Osasuna hizo explotar al argentino, que se desahogó en sus redes sociales para ponerse claramente de parte de la grada: "Duele no la derrota de hoy, sino la imagen como club que estamos dando. Son muchos los problemas y lo más llamativo es que no vemos solución a nada en un año tan bueno y habiendo conseguido volver donde el club se merece, que es estar en Primera división. Las cosas marchan peor: femenino, cantera, nosotros mismos, la afición. Esperemos que no sea tarde para hacer autocrítica y 'querer mejorar', porque este club necesita ya dar un paso adelante en todo sentido". Un aviso a navegantes, un guante que debe recoger Martín Presa, pues Trejo señalaba otros aspectos, sobre todo en la sección femenina, con la contratación de un técnico acusado de conducta impropia por un audio de contenido machista que fue afeado incluso desde las autoridades gubernamentales.
Mientras tanto, a menos de tres semanas de que se juegue la vuelta de las semifinales del torneo del K.O., el rival del Betis es un polvorín. El propio entrenador rayista, Andoni Iraola, lo reconocía en sala de prensa tras caer ante un teórico rival directo de nuevo, Osasuna: "Nos afecta mucho esta situación, pero hay que mirar el césped y no coger el atajo fácil, porque no es excusa, aunque es cierto que el ambiente afecta, porque todo el mundo está pendiente de otras cosas. No sé cómo solucionarlo; sólo slo sé que al equipo le perjudica y no puedo decir mucho más".