Rui Silva debutó ayer con el Real Betis Balompié en el partido que el conjunto bético disputó con el Wolverhampton Wanderers en el Municipal de La Línea de la Concepción, y que supuso la primera derrota en pretemporada de los de Manuel Pellegrini en el que era el segundo encuentro preparatorio verdiblanco tras el triunfo contra el FC Winterthur por 0-4.
El portero portugués, que llegó como agente libre tras acabar su contrato con el Granada CF, salió al terreno de juego tras el descanso y disputó los segundos 45 minutos en los que encajó el tanto de la derrota, obra del italiano Patrick Cutrone, en el 83’.
Poco pudo hacer en esa jugada el nuevo bético que sí dejó muestras de su calidad como arquero. Primero deteniendo un fuerte disparo, desde la frontal del área, de Ruben Neves, que desvió bien, saliendo por alto de forma exitosa en los saques de esquina de los Wolves y mostrando gran habilidad con el balón de los pies, pues se animó a iniciar alguna jugada de ataque desde atrás.
Pocas conclusiones más se puede sacar del debut de Silva, que tras empezar a entrenar esta semana ya tiene su vista en la temporada 2021/2022, en la cual tendrá que competir con Claudio Bravo por la titularidad en el Real Betis Balompié.