El próximo
lunes día 11 de enero en el oscense estadio de El Alcoraz, en el choque que cerrará la jornada 18 de LaLiga, se verán las caras los
dos equipos más goleados de Primera división: el Real
Betis de Manuel Pellegrini, que ha recibido ya 31 tantos en contra, y el colista de la máxima categoría del fútbol nacional, un
Huesca (26 tantos encajados) que todo apunta a que estrenará entrenador en este encuentro.
Para mayor morbo, este nuevo técnico, si la intensa rumorología se cumple, sería un viejo conocido del club verdiblanco:
¡Rubi!Con sólo una victoria en 17 jornadas,
se da por inminente el despido de Míchel Sánchez como entrenador de la SD Huesca, que lleva ya 11 fechas seguidas en puestos de descenso. En principio, y salvo sorpresa mayúscula, el preparador madrileño dejará de ser técnico del equipo aragonés en las próximas horas tras la última derrota frente al FC Barcelona (0-1) y
el mejor situado para relevarle es Joan Francesc Ferrer Sicilia, más conocido como Rubi.
El de Vilassar de Mar
ya dirigió al Huesca en la temporada 2017/2018, en Segunda división, y logró el
primer ascenso de la historia del cuadro azulgrana. No les llegó a dirigir en Primera, puesto que Rubi aceptó la oferta del
RCD Espanyol, con el que acabó la 18/19 en
puestos de Europa League antes de recalar en el Betis.
En Heliópolis no tuvo suerte y ni siquiera llegó a terminar la 19/20, siendo
destituido a falta de cuatro jornadas para el final de curso y sustituido por el secretario técnico verdiblanco,
Alexis Trujillo. Ahora, si las noticias se confirman, su vuelta a los banquillos llegará con una oportunidad para tomarse su
'venganza' particular.
El aún entrenador de la Sociedad Deportiva Huesca, Miguel Angel Sánchez 'Michel', señaló el domingo, tras la derrota de su equipo contra el Barça, que ve a su plantilla competir y que están "vivos".
"Ningún aficionado puede hablar mal de los jugadores y si es así será por errores pero no porque no se dejen la vida y me lo demuestran en los entrenamientos. El equipo compite muy bien.
Es una situación incómoda y me preocupa. Busco soluciones y creo que las tengo", aseguró en rueda de prensa.
Igualmente destacó que
la derrota "duele", aunque sea contra el Barcelona, porque
el equipo necesita un cambio y que frente al conjunto catalán era un día especial ante un rival de entidad y que de haber logrado un buen resultado podía suponer
"una vuelta de tuerca".
Sobre si
teme por su continuidad en el banquillo, Míchel indicó que ésa no es su máxima preocupación ahora y que, como lo que suceda no depende de él, no se fija en ello porque considera que hay gente que merece que vayan bien las cosas y porque sus hombres
están "currando muy bien".