El entrenador del Betis B,
José Juan Romero, agradeció en la radio oficial que el club se haya volcado con el filial,
fletando tres autobuses gratuitos para que los socios acompañen a su equipo en el partido de vuelta de la primera eliminatoria de campeones ante el Lorca, por lo que ahora espera corresponderles con un resultado que certifique el
regreso a Segunda B. “Tener gente allí es un plus; seguro que nos ayuda. A ver si somos capaces de certificar algo tan bonito”.
Sería un hito más que meritorio, ya que las lesiones, una lacra que ha afectado al segundo equipo heliopolitano durante toda la temporada, no han desaparecido ni en este momento tan crucial: “El domingo pasado, cuando se cayó Juanjo Mateo, le dije a mi mujer ‘creo que me están grabando un reality, porque tanta mala suerte no se puede tener’. Para este partido
recuperamos a Francis y a Junior, aunque éste veremos el sábado cómo está. Todos los días me escriben y me dicen que están bien, pero que no les dan el alta. Son jugadores que han sido importantes y se quedan sin vivir lo bonito que fue el último partido y el del próximo domingo. Francis es una bestia. Si se tratara de otro futbolista, podríamos pensárnoslo, pero, si hay un futbolista que puede jugar después de esta enfermedad y rendir a un nivel alto, ése es Francis. Si está medianamente bien, jugará de inicio. Al final, tengo que dar las gracias a las paperas, porque, si tengo que poner un once con todos disponibles, habría sido difícil”.
El de Gerena explica que hizo los cambios en la ida
“buscando el segundo gol” y que, cuando lo materializó Loren, metió a José Carlos “para tener defensa de tres, pero dejando a los tres de arriba” para sentenciar. “Les pedí cabeza, porque somos un equipo muy joven y, en momentos, eso nos ha costado puntos. En una eliminatoria hay que tener control, y lo hicieron muy bien”. Para el decisivo duelo en el Artés Carrasco, una llamada a navegantes: “No temo una encerrona en lo que se refiere a la afición, pero sí temo lo que rodea al fútbol. Que gane el que sea mejor; no quiero que me quiten nada.
El Lorca va a salir igual que aquí. No creo que vayan a tumba abierta; eso lo harán con los minutos, pues saben que somos peligrosos a la contra. Ojalá salieran ofensivos y tirandola línea arriba, porque nos darían más opciones. Pero es complicado, ya que un gol nuestro prácticamente nos mete en Segunda B. Queremos ganar los dos partidos y subir por la puerta grande. No entra en mis cábalas contemporizar”.
Por último, se refirió a la acusación de amaño en el 1-7 al Espeleño:
“Qué casualidad que esto salga hoy... Al rival que hubiera estado delante el Betis B le habría metido siete. Como si no hubiéramos ganado todos estos partidos... Lo que me importa es que no nos descentremos. Competimos muy bien después de la semana que habíamos pasado, y ahora espero lo mismo”.