Desde un principio, el Betis intentó que la vinculación de Rubén Pardo con el conjunto verdiblanco fuera más extensa. Primero, se solicitó un préstamo de larga duración (lo que queda de temporada y la siguiente) y también que se incluyera una opción de compra. Ante ambas peticiones encontró la negativa del conjunto easonense.
Sin embargo, según contaban en Radio Sevilla, sí que hubo un pacto no escrito para que, en caso de que la escuadra ‘Txuri-Urdin’ decidiera cederlo el próximo curso, hubiera una opción preferencial para el conjunto bético, si es que estos vuelven a estar interesados en contar con Pardo.
De cómo se desenvuelva el medio riojano de aquí al final del curso dependerá cómo se resuelve su futuro.