Alvaro Arenillas5 min lecturaA estas alturas de la película sobra hablar de LeBron James como jugador de baloncesto, pero no tanto de sus aspiraciones. Con 20 temporadas completadas en su haber (y camino de sumar la 21), El Rey tiene numerosos récords individuales como el de jugador con más puntos en la historia de la NBA. Sin embargo, desde hace tiempo se le quedan cortos los cuatro anillos conseguidos (los mismos que Stephen Curry y dos menos que Michael Jordan). Ante tal escenario, y habiendo conseguido en la burbuja de Orlando el primero con Lakers, es obvio que esperaba verse de nuevo en esa pelea más pronto que tarde –la edad aprieta–. ¿Qué ocurre? Que lleva tres años sin Finales y en el presente curso 2023-24 está coleccionando palos como el que se llevó anoche.
Así es. Todo el hype provocado por la victoria en la primera edición de la Copa NBA está saltando por la borda. Si en ese momento de diciembre parecía que los Lakers y el propio LeBron maravillaban, ahora las críticas (y los malos resultados) están golpeándoles casi noche tras noche. El último ejemplo llegó hace escasas horas, y es que recibiendo a unos Phoenix Suns que tampoco están para tirar cohetes, se llevaron un buen varapalo que se mide por un resultado final de 109-127.
En la que es la 10ª derrota de los californianos en los últimos 14 partidos, James se quedó en 10 puntos, 9 asistencias y 5 rebotes en 24 minutos de juego. Básicamente no estuvo más tiempo en pista porque el partido quedó rápidamente cerrado en su contra, y es que en el tercer periodo los de Arizona dominaban por más de 30 puntos. Es solo una derrota, sí, pero una que remarca que en Los Ángeles necesitan hacer algo cuanto antes para que El Rey puede luchar de verdad por una nueva corona a partir del mes de abril.
Mientras en el lado oro y púrpura sufrían, para los Suns el partido supuso un soplo de aire fresco. El Big Three formado por Kevin Durant, Devin Booker y Bradley Beal empieza a carburar. Aunque KD hizo solo 18 puntos, Bookers logró 31 y el ex de los Wizards marcó el ritmo de la noche con hasta 37 tantos. Ahora mismo tanto unos como otros son equipos de play-in en la Conferencia Oeste, pero se ven más nubarrones en el horizonte de Lakers.
Viajando hasta Oklahoma City, fue allí donde ocurrió lo inesperado. No hablamos de que no pensásemos que los Thunder iban a ganar a los Blazers, pero sí que era casi imposible que les batiesen por hasta 62 puntos. Así fue. OKC venció 139-77 y logró la que es la quinta victoria con mayor margen de la historia de la NBA. Curiosamente, son los propios Thunder los que se llevaron la peor paliza de la historia al caer ante Memphis Grizzlies por 73 puntos el 2 de diciembre de 2021.
Y no podemos dejar sin hacer mención al choque que se vivió en Milwaukee entre Bucks y Celtics. Los dos favoritos de la Conferencia Este se veían las caras en lo que se esperaba fuese un espectacular enfrentamiento. No fue así. Los de Giannis Antetokounmpo destrozaron desde el primer cuarto a Jayson Tatum y compañía para dejar claro que han encajado todo lo necesario para ir por el anillo con todas las garantías.
Cleveland Cavaliers 111-102 Brooklyn Nets
Milwaukee Bucks 135-102 Boston Celtics
Oklahoma City Thunder 139-77 Portland Trail Blazers
Dallas Mavericks 128-124 New York Knicks
Los Angeles Lakers 109-127 Phoenix Suns