Dallas ha sellado definitivamente su pase a la Final de la NBA tras una gran actuación de nuevo de la dupla Doncic-Irving (72 puntos entre ambos) en el partido decisivo ante los Minnesota Timberwolves (103-124). El esloveno además fue elegido como MVP de las Finales del Oeste. Se enfrentarán en un duelo bastante igualado frente a los Boston Celtics en la pelea por el anillo de la NBA.
"Este trofeo es de todo el equipo, no soy yo. Ir a las Finales, no me lo puedo creer", aseguró un emocionado Doncic al acabar el partido en la entrevista a pie de campo. No era para menos. El esloveno fue el líder de su equipo, sin lugar a dudas, sobre todo por su gran desempeño en el último cuarto, al igual que Irving. Ambos estuvieron sublimes.
Ya desde el inicio se veía con muchas ganas a Doncic, siendo infalible en sus tiros. No solo él, sino todo su equipo, estaban dispuestos a reventar el partido tras un ligero traspiés sufrido en el cuarto partido. El primer cuarto se iba a encargar de sellarlo un Luka Doncic que iba a firmar dos triples y dos bandejas increíble. En frente Anthony Edwards hacía de las suyas también para tratar de que Dallas no se escapase demasiado en el marcador. Sin embargo, parecía prácticamente imposible (19-35).
Por si fuera poco, en la segunda tanda los Mavericks aceleraron casi más que en el inicio del partido. Kyre Irving iba a aparecer esta vez para apuntarse a la aplastante victoria de Dallas. Eso sí, Doncic seguía batiendo récords firmando hasta su quinto triple del partido y eso que no habían llegado ni siquiera al descanso. Towns iba a ser quien respondiera para los Wolves, sin embargo, esto apenas hacía cosquilla a los de Doncic. La diferencia entre ambos equipos estaba siendo abrumadora (40-69).
En el tercer cuarto los Mavericks se iba a ir incluso a más de 30 puntos de su rival. Y eso que Edwards también se apuntaba a un intento de gesta ante el dominio de Dallas. No iba a tener efecto como era de esperar. Fue en estos momentos cuando Jason Kidd trató de dar un toque de atención a sus muchachos, viendo cómo se les ponía de cara la eliminatoria definitivamente.
La Final de la NBA ya estaba decidida incluso antes de que acabase el último cuarto. Los Wolves se dieron prácticamente por vencidos. Finch, viendo la diferencia de puntos abrumadora a la que se sometía Minnesota, decidió introducir a la mayoría de su quinteto suplente para darles minutos. Finalmente el encuentro acabó con 103-124. Luka Doncic fue elegido el MVP de las Finales del Oeste y los Dallas Mavericks ya sueñan con el anillo de la NBA.