Alvaro Arenillas3 min lecturaLos actuales Chicago Bulls están a punto de saltar por los aires. Si en verano era Arturas Karnisovas, presidente de la organización de Illinois, quien dada un voto de confianza al actual proyecto, un solo mes de NBA ha bastado para que cambie de opinión la franquicia; tanto es así que no sólo desde la misma habrían mostrado su interés en poner a sus estrellas a la venta; sino que la más rutilante, Zach LaVine, le ha seguido el juego mostrando públicamente su malestar con el equipo.
Tal cual suena. El guard All-Star fue pieza importante del último triunfo ante Miami Heat; sin embargo, ello no le impidió abandonar la cancha justo después de la bocina final, mientras todos sus compañeros se quedaban en la misma celebrando el triunfo. Tan enfadado iba que cuando una de las trabajadoras de la franquicia de acercó a pedirle que no se marchase a vestuarios, directamente la empujó. He aquí el momento.
Sin que el jugador de 28 años haya dado explicación alguna sobre su comportamiento, el periodista K.C. Johnson de Chicago Tribune asegura que éste lleva enfadado con su entrenador desde hace un año; y es que fue en noviembre de 2022 cuando le sentó en el banquillo en la recta final de un partido, algo que a día de hoy LaVine seguiría recordando con algo de rencor.
Dando por hecho que su situación en los Bulls está vista para sentencia, Shams Charania The Athletic ha asegurado que Los Angeles Lakers son unos de los varios interesados, poniendo incluso más hincapié en que los Toronto Raptors se lancen a por él. Los canadienses, quienes poco a poco van mejorando en la actual campaña, tienen varios contratos que podrían interesar a Chicago en cuanto a iniciar una reconstrucción, ya que le liberarían de mucho salario pensando en la agencia libre de 2024.
Para ser exactos, hablamos de los acuerdos de Pascal Siakam y OG Anunoby, quienes serán agentes libres el 1 de julio de 2024 casi con total seguridad. Antes de perderlos a cambio de nada, es seguro que los de Canadá explorarán sus opciones. Y en esa línea, la de iniciar un nuevo proyecto, podría ser interesante unir a LaVine a Scottie Barnes, un alero de tercer años en el que tienen puestas muchas esperanzas de presente y futuro. En cualquier caso, la pelota está por ahora en el tejado de los Bulls, por lo que toca esperar.