Marta Sánchez4 min lecturaSi hay alguien que ha destacado en el Abierto de China ha sido Coco Gauff, reafirmando que a sus 20 años ha llegado para quedarse. Además de Carlos Alcaraz, que ganó la final de este torneo contra Jannik Sinner, la estadounidense se hizo con el triunfo en Pekín tras superar a Karolina Muchova. Sin embargo, la tenista está acostumbrada a recibir duras críticas cada vez que 'falla' o que no obtiene los resultados esperados en una competición.
Cansada de estos reproches continuos, Gauff ha decidido pronunciarse al respecto después de proclamarse campeona en el China Open. La tenista aclara cuál es su estado de forma y también da la clave sobre el truco definitivo para ganar en este deporte.
La estadounidense ha sorprendido a todos los aficionados del tenis con el buen nivel mostrado en Pekín, acabando con Paula Badosa en 'semis' tras una brillante remontada y sometiendo a Muchova en la final. En un año en el que no lograba encontrarse al 100% en las pistas está finalizando la temporada por todo lo alto, recuperando sensaciones y escalando hasta el cuarto puesto en el ranking WTA. Por ello no se quiere quedar callada ante las críticas cuando no logra los resultados esperados.
"Muchas veces la gente se olvida de que todavía estoy en la fase de desarrollo de mi carrera y de que no todo va a ser genial. La mayoría de la gente que lo está haciendo bien tiene 25 años o más en el Top 10, quizá con la excepción de Iga. Nos queda mucho camino por recorrer y todavía tengo muchas cosas en las que trabajar, pero estoy orgullosa de mí mismo hasta ahora" explicaba la tenista, que está muy convencida sobre cómo seguir progresando en el tenis.
"He hecho el mejor tenis desde hace muchísimo tiempo, estoy orgullosa de cómo he competido porque no ha sido un torneo nada fácil. Sentí que podía ganar a cualquiera" aseguraba Gauff sobre sus sensaciones en Pekín.
Además, explicaba cómo ha encontrado este camino ganador en las competiciones: "Me ha ayudado mucho a salir relajada a pista pero también tener la madurez suficiente como para saber que este partido no me iba a cambiar la vida. Pasara lo que pasara, tenía claro que estaría orgullosa de mí misma. Ganar torneos me ha hecho ver que es genial todo hoy, pero que mañana amanecerá un nuevo día y seré la misma persona. Más del 70% de la gente ni siquiera sabrá que he ganado este torneo. El tenis no puede medir mi valía como persona".
El próximo reto de la número cuatro está en Wuhan, en un nuevo Masters del WTA. Debutará este martes 8 de octubre y si todo se le da bien, podrá volver a encontrarse con Paula Badosa, esta vez en la final si la española también se clasifica.