"No sé opinar del VAR porque no nos dejan saber hacerlo, porque los árbitros nos han explicado una cosa y luego resulta que es de otra. Nos han contado los árbitros que el VAR sólo entra en acciones de 'blanco o negro', en caso de un error de bulto, pero que el VAR rearbitra los partidos, que las jugadas 'grises' no se reinterpretan. Eso no ha sido así hoy", se quejaba
Julen Lopetegui al finalizar el
Sevilla-Rayo, donde le anularon un gol y rearbitraron una acción de un penalti sobre Rafa Mir a instancias del videoarbitraje.
La queja podría ser algo aislado, dado que cada vez hay más quejas del VAR, ya que el criterio de interpretación cambia según los partidos. Pero en el caso del
Sevilla FC llueve sobre mojado. Tras el empate en Vallecas, el conjunto nervionense mantiene la segunda posición a siete puntos del
Real Madrid, que tiene un partido menos. Sin embargo, si nos atenemos a las acciones en las que el VAR le ha corregido jugadas suyas, con más o menos acierto, en lo que llevamos de temporada, el conjunto de Lopetegui debería estar al frente de la tabla.
Así lo señala Pedro Martín (@pedritonumeros) en su cuenta de Twitter. El preiodista especializado en estadísticas indicaba que el Sevilla Fútbol Club es el conjunto más perjudicado por las revisiones del VAR en lo que llevamos de temporada.
En las 28 jornadas disputadas, en el cómputo total de las acciones revisadas a favor y en contra del Sevilla, el equipo de Nervióm
debería llevar 62 puntos y sería líder del campeonato con un punto de ventaja sobre el Real Madrid, que sólo contaría con 61 y no con los 63 que tiene ahora.
Aunque algunas estén biene señalizadas o, al menos, puedan generar una lógica duda, hay otras que claramente invitan a la polémica. En el caso del partido de hoy Gil Manzano avisó a Martínez Munuera para que revisara el gol de Rafa Mir y el penalti cometido sobre él mismo.
Y si bien en el primer caso sí entraría dentro de los supuestos que son revisables y el árbitro, tras ver las imágenes, podría interpretar que es mano previa, no ocurre lo mismo en el caso de penalti, que es claramente una acción rearbitrada. En este caso, lo único que podía obligar al árbitro alicantino a revisar la jugada habría sido en el caso de que el defensa no hubiera tocado a Rafa Mir, no para reintepretar si el contacto era suficiente para derribarle. Es de lo que se quejaba Lopetegui y de lo que el Sevilla, previsiblemente, se quejará ante la RFEF y ante el jefe de árbitros, Medina Cantalejo.