Tras su gran año en el
Granada, donde fue pieza clave para la primera clasificación europea del conjunto andaluz,
Carlos Fernández se convertía en una de los delanteros más codiciados del pasado mercado estival. Deseado por varios clubes, al final acabó quedándose en un
Sevilla FC en el que Lopetegui quiere contar con tres puntas, pese a sólo jugador con uno, para evitar eventualidades.
El Granada intentó repescarlo, pero tenía bien claro que no iba a tener opciones viendo los rivales con los que se encontraba, entre ellos
un Benfica que también pujaba por Cavani o un
Celta que buscaba un delantero centro para cerrar su ataque. El que estuvo más cerca de llevárselo fue la Real Sociedad, pero a cambio tenía que salir Willian José y éste se negó a ser cedido.
Tras quedarse en el
Sevilla FC, el punta de Castilleja de Guzmán partió como tercer delantero y, pese a tener más oportunidades que Dabbur el pasado año, apenas ha contado en algunos partidos marginales y después de tres meses de competición no suma ni 200 minutos repartidos en siete encuentros. Esto le hace aparecer de nuevo entre los candidatos a cambiar de aires una vez se abra el mercado el próximo 4 de enero.
Y ahí surge el nombre de uno de sus antiguos pretendientes, un Celta que vuelve a tener un '9' como gran y único objetivo. “Como referencia de área tenemos a
Santi Mina y ningún otro jugador de los que tenemos tiene experiencia en esa posición, que es importante", señalaba el nuevo técnico celeste, un
Coudet que apremia a su directiva para que incorpore un delantero: “Sé que el club hará el máximo esfuerzo dentro de sus posibilidades para poder armarnos de la mejor manera pensando en el segundo semestre de la competición”.
No será la única opción, pero si bien el
Celta no llegaba este verano a las pretensiones del Sevilla todo podría cambiar en este mercado y también sería el propio club nervionense el interesado en que su delantero no se deprecie más con vistas al próximo verano, cuando a Carlos Fernández sólo le quede un año de contrato y, o sale, o deberán negociar una renovación para que no se escape gratis poco después.
Todo ello si
Carlos Fernández quiere, que está por ver. Aunque después de una buena experiencia en Galicia (Deportivo), no parece que vaya a hacer ascos a un equipo donde le asegurarían los minutos que aquí no tiene.