Con los fichajes de
Idrissi y Rekik, el primero, ya oficial, el
Sevilla podría tener el capítulo de incorporaciones cerrado en este último día de mercado, salvo algún movimiento sorpresa de última hora o alguna propuesta 'in extremis' (Carlos Fernández...). Por ello, la prioridad para
Monchi pasa a centrarse en el capítulo de salidas para aligerar la masa salarial del plantel nervionense.
Uno de los jugadores que saldrían es
Amadou. Con contrato hasta 2022, en Nervión dan por hecho que será imposible recuperar la fuerte inversión realizada en 2018, con
Joaquín Caparrós al frente de la dirección deportiva, cuando se pagaron 14,4 millones de euros por su fichaje al
Lille, siendo
Francia el mercado en el que más cartel tiene el camerunés.
Al respecto, según el diario 'L'Equipe', la marcha de
Diallo al
Southampton a cambio de 15 millones de euros podría acelerar la llegada cedido de Amadou al
Brest, convirtiéndose de nuevo el fútbol francés en una posible solución para el sevillista. No obstante, no es la única opción que baraja en la Ligue 1. Según el citado medio, el
Angers también piensa en el sevillista; se habla de una cesión para sustituir a Baptiste Santamaria, fichado por el
Friburgo.
El centrocampista ha sido relacionado en las últimas semanas con varios equipos galos, siendo el Estrasburgo uno de los que sonó con más fuerza, además de equipos de LaLiga, como el
Cádiz. La pasada campaña, tras un comienzo positivo en el
Norwich City, se marchó en enero al
Leganés tras jugar tan sólo 13 encuentros con el conjunto inglés, pero en esta segunda cesión no le fue mejor y apenas disputó diez partidos con el cuadro pepinero.
Las próximas horas se antojan frenéticas en los despachos de Nervión. Además de concretar los fichajes de los citados Idrissi y Rekik, intensifica la actividad para dar salida a los numerosos futbolistas con los que no cuenta Julen Lopetegui, entrenador nervionense. Esto son los casos de Roque Mesa, Bryan Gil, Aleix Vidal o Gnagnon.