Es sabido ya por todo el sevillismo que
Monchi no descansa y que tanto él como su grupo de trabajo están aprovechando este
Estado de Alarma que ha decretado el Gobierno para teletrabajar desde casa y comenzar a darle forma al
Sevilla FC de la 20/21. Todo ello, sin que el ERTE anunciado recientemente por el club afecte a dicha tarea, la cual es fundamental para una entidad como la blanquirroja.
La prioridad a día de hoy dentro de esta labor es, lógicamente, la de encontrarle un recambio a Banega, que se marchará al fútbol árabe cuando acabe la presente temporada, la cual sigue en el aire como consecuencia de la pandemia del
Covid-19.
Entre los objetivos que maneja
Monchi para tan complicado rol, se encuentra el del franco-argelino
Maxime López, joven centrocampista ofensivo de 22 años que milita en el
Olympique de Marsella y que, como bien viene informando ESTADIO Deportivo a lo largo de las últimas semanas,
es seguido de cerca por la dirección deportiva sevillista, que ya
intentó hacerse con sus servicios el pasado verano y que también realizó una oferta por él en enero, como el mismo
Maxime López se encargó de confirmar en Francia.
Con contrato hasta 2021, la delicada situación económica por la que atraviesa el Marsella y sus ganas de jugar (ha perdido protagonismo con
Villas-Boas) le empujan a cambiar de aires este verano, siendo el
Sevilla FC y
LaLiga sus prioridades.
La pregunta ahora, por tanto, es si el joven
Maxime López es el recambio idóneo para suplir a un futbolista de la talla de
Éver Banega, mucho más experimentado al más alto nivel. Una incógnita que el español
Álvaro González, compañero de Maxime en el vestuario del Marsella, tiene clara. “Es joven, pero tiene mucha calidad. Se asocia muy bien sobre el campo”, asegura a ESTADIO Deportivo el zaguero de Potes, quien en su día, tras destacar con un débil Racing de Santander, también estuviera en la agenda de Monchi como recambio de Martín Cáceres: “Ve el fútbol muy bien y es inteligente con la pelota. Tiene 22 años y
le queda mucho por mejorar todavía, pero tiene margen también”.
Pese a ello, Álvaro González entiende que el todavía sevillista
Éver Banega y
Maxime López son “algo diferentes”, pues el franco-argelino “es muy eléctrico” y “de movimiento corto”. Eso sí, no tiene duda el ex del Villarreal, entre otros equipos, de que el Sevilla FC “acertaría” firmando a Maxime López, pues “a medida que coja experiencia es un futbolista para un buen equipo” como el Sevilla FC, que aspira a Champions y que actualmente es tercero en la tabla, a la espera de que se retome la competición, paralizada por el Covid-19.
Una baja, la de Maxime López, que de concretarse sería sensible para el OM, a juicio de su compañero Álvaro: “Aquí el año que viene lo necesitamos para la Champions”. Y es que estar la próxima temporada en la máxima competición continental a nivel de clubes se antoja fundamental para los intereses económicos de su equipo, que tiene que cumplir con el ‘Fair Play’ financiero: “Si nos metemos, recuperaremos bastante. Tienen deudas de años en los que no se han hecho bien las cosas”.
Entiende "algo de español"Junto a sus habilidades sobre el terreno de juego,
Álvaro González también se refirió durante su conversación con ESTADIO Deportivo a la personalidad del pretendido
Maxime López, siendo hoy día tan importante la valía de un futbolista dentro como fuera del campo. Un factor determinante a la hora de adaptarse a una nueva experiencia. En ese sentido, el zaguero español destacó que su por ahora compañero de equipo “no habla español”, aunque “entiende algo”. Una barrera, la idiomática, que no sería un gran problema, aunque le haría falta ponerse las pilas con el idioma, pues lo maneja “poco”.
Por otro lado, como compañero, Álvaro resalta que es un chaval extrovertido y muy “buen compañero”, por lo que no tendría ningún problema de aclimatarse al vestuario sevillista, o a cualquier otro fuera de
Francia. Todo ello, a pesar de que actualmente están entrenando “por videoconferencia”, al estar en Marsella confinados al igual que se está en España. Y es que resalta: “El
OM, como club, es top; con mucha masa social y un estadio brutal. Recuperándose de años complicados”.