La renovación de Vaclik, sin cláusulas físicas

Ha atravesado algunos momentos de duda. Las derrotas ante el Eibar y el Barcelona le dejaron de algún modo señalado. Pero Tomas Vaclik ha vuelto a responder. Sus actuaciones ante el Valencia y, especialmente, el pasado domingo contra el Atlético, con penalti parado incluido, han sido determinantes y han supuesto un impulso para el experimentado meta checo; sin duda alguna, el mejor fichaje de Caparrós cuando el pasado verano comandaba la dirección deportiva del Sevilla FC.

Pero independientemente de sus dudas pasadas o su actual estado de forma, en el club de Nervión confían plenamente en sus capacidades y trabajan en su renovación desde hace algún tiempo. Según apunta El Confidencial, la idea es que amplíe su contrato, que acaba en junio de 2021, por al menos dos temporadas más, si bien el cancerbero desea que sean tres.

Pero no es la duración lo más peculiar en esta negociación. En su momento, Vaclik aterrizó en Nervión de un modo cuanto menos peculiar. En los habituales exámenes previos a la firma de su contrato, los médicos nervionenses detectaron que su rodilla derecha presentaba inestabilidad y riesgo alto de lesión. La historia se repetía, pues ya en 2011, había firmado por tres años con el equipo holandés De Graafschap y no superó las pruebas, teniendo que regresar a su país.

En esta ocasión, sin embargo, Vaclik y su agente no se quedaron de brazos cruzados y ofrecieron una propuesta arriesgada a los dirigentes del Sevilla. Según el citado medio,  si se lesionaba y dejaba de jugar un partido por culpa de la rodilla, el checo no cobraría, otorgando incluso al club nervionense la posibilidad de rescindirle el contrato.

Eran tantas las ganas de dar el salto a LaLiga, y su confianza en sí mismo, que Vaclik apostó fuerte, firmando un contrato condicionado a su físico, como su fichaje, pues el Sevilla abonó dos millones de euros al Basilea y pactó hasta 4,6 más en variables, en función del rendimiento del portero internacional.

El resultado no pudo ser mejor, pues ha sido indiscutible desde que aterrizó y sólo se perdió la campaña pasada cinco encuentros de Liga por algunas molestias. Por ello, el club ya le prometió en su momento que nunca haría caso de esas cláusulas y ahora, Monchi trabaja en una mejora y ampliación de contrato que de ninguna forma volverá a estar supeditado a su estado físico.