El Sevilla, que el pasado miércoles ganó 1-2 en el campo del Basaksehir turco en la ida de la ronda previa de la Liga de Campeones, refrendó su clasificación en la vuelta en las tres eliminatorias europeas que empezó con una victoria a domicilio, y siempre lo hizo con un triunfo en el Sánchez Pizjuán.
La primera vez que se dio esta circunstancia fue en los dieciseisavos de final de la Copa de la UEFA de la temporada 05/06, en los que el Sevilla venció en la ida por la mínima, con un tanto de Jordi López, en Moscú al Lokomotiv, que también perdió el partido de vuelta por 2-0 merced a los goles de Maresca y Puerta.
En la campaña siguiente, en la ronda previa de la misma competición, los sevillistas iniciaron la defensa de su título ante el Atromitos griego, al que vencieron por 1-2 (Kepa y Duda marcaron frente al gol local de Korakakis) en la ida y golearon en la vuelta (4-0, con doblete de Luis Fabiano y dianas de Ioannoy, en propia meta, y Kepa).
La tercera y última vez que el Sevilla ganó un duelo de ida a domicilio en Europa fue en los dieciseisavos de final de esa misma Copa de la UEFA 06/07, cuando se impuso por 0-2 (marcaron Poulsen y Kanouté) en Bucarest al Steaua y lo derrotó también en la capital hispalense (1-0), con gol del delantero ruso Alexander Kerzhakov.
Alejandro Sáez2 min lectura