Los regalos de Monchi rara vez decepcionan

Las ilusiones y los buenos regalos en estas fiestas llegan de manos de Papá Noel para unos, de SS.MM. los Reyes Magos para otros y, en el caso de los sevillistas, de un Monchi que no acostumbra a fallar en sus elecciones. Al 'mago' de San Fernando, de hecho, le escribió su carta este año Sampaoli, que pide tres refuerzos: "un central, un delantero y un volante".

Y es que rara vez ha acabado en decepción una compra invernal del director general deportivo del Sevilla. Así, a sólo unos días para la apertura de un mercado de fichajes en el que parece segura la llegada de al menos uno o dos jugadores, cabe repasar la experiencia en esta ventana de transferencias de un Monchi que presenta muchas más luces que sombras entre los 20 futbolistas que ha contratado en enero a lo largo de los 16 años que lleva en el cargo y que van desde Rubén Vega, el primero, a la repesca de Fazio y Diogo, los últimos; quienes posiblemente no sean buenos ejemplos ni hagan justicia con los éxitos del gaditano.

Rubén Vega llegó cedido procedente de la Real Sociedad en el invierno de 2001 y ofreció un pobre rendimiento en un Sevilla que luchaba por escapar de la Segunda división. El propio Vega, Nikos Machlas (2003), Magallanes (2004), Babá y Javi Hervás (2011), Stevanovic (2014) y la segundo etapa de los mencionados Fazio y Diogo, marcada por el ostracismo, son los únicos lunares en una relación de nombres donde destacan, sin duda, los de parte de la columna vertebral del llamado 'Sevilla de los títulos': Dani Alves (2003), Adriano (2004), Escudé (2006) o el propio Fazio, que llegó para el filial pero acabó convirtiéndose en el líder de la zaga. También en el capítulo de aciertos sonados se encuentran Gary Medel e Ivan Rakitic, que cambiaron la imagen del equipo tras su económica llegada en 2011, y también las de José Antonio Reyes (2012) y Beto (2013). Quizás no merecedores de tanto elogio pero con un rendimiento digno estarían Torrado (2002), Kerzhakov (2007) o un Stankevicius que clavó lo primero que se le pide a un refuerzo invernal: que solucione carencias como las que el Sevilla de 2010 sufrió con la baja por dolencia cardiaca de Sergio Sánchez.

Enero no es un mes de grandes dispendios en Nervión, máxime cuando la idea de Monchi ha sido siempre la de fichar sólo si es necesario. De hecho, en 2008, 2009 y 2014 no llegó a nadie.


- Los más destacados:
Dani Alves: Llegó en enero de 2003 por medio millón y se fue al Barça en 2008 por unos 36 kilos, tras ser capitán y haber ganado cinco títulos entre 2005 y 2007.

Adriano: Jugó como lateral y extremo en ambas bandas y, lesiones al margen, siempre cumplió. Marcó en la final de Glasgow.

Escudé: Llegó en enero de 2005, justo antes de la explosión de títulos, y formó gran dupla con Javi Navarro, asumiendo la resta y la salida de balón.

Fazio: Fichado en enero de 2006 para el filial, se fue tras levantar el que sería su cuarto título: la Europa League de 2013 en Turín. El año pasado volvió cedido por el Tottenham y sólo jugó seis partidos (463’), pero ganó en Basilea otra Europa League.

Rakitic: El mejor fichaje invernal del Sevilla en los últimos años llegó en enero de 2010 por un módico precio de 2 kilos y dejó más de 20 tras ser traspasado al Barcelona, además de capitanear la vuelta del Sevilla ganador de títulos.

Medel: El chileno fue otra de las gangas de Monchi y se acopló rápidamente, siendo capaz de sostener al equipo y de marcar cuando se incorporaba.

Reyes: Presentado el Día de Reyes de 2012, en su segunda etapa jugó 157 partidos y ganó tres títulos. El último, lo alzó como capitán.

Beto: El Sevilla encontró en el luso a un meta de garantías que fue titular desde su llegada y que rindió muy bien en sus primeras temporadas.