Alvaro Arenillas4 min lecturaRed Bull te da alas. Eso llevamos escuchando desde hace muchos años y ahora, tras años disfrutando de ello en el mundo del automovilismo, sobre todo en la Fórmula 1 con los mundiales de Max Verstappen y antes de Sebastian Vettel, ha llegado la hora de que la marca energética expanda sus alas y aterrice en otro deporte de enorme repercusión mundial como es el ciclismo.
Tal cual suena, en Red Bull han optado por adquirir el 51 por ciento del equipo Bora, uno de los que integran el calendario World Tour y uno de los más potentes del mismo; tanto es así que hace escasos meses supimos que firmaban al ganador de tres Vueltas a España y un Giro de Italia (el de 2023) Primoz Roglic.
Es obvio que la entrada de un patrocinador tan importante en el mundo de las dos ruedas en ruta iba a crear revuelo. Así ha sido más allá de Bora, pero en el equipo alemán no pueden sino aplaudir lo que entienden es un enorme paso al frente para sus aspiraciones en los siguientes años.
"Ya han demostrado en otros deportes que pueden marcar la diferencia. Mi objetivo como director es formar un equipo que sea realmente competitivo y la llegada de Red Bull podría significar nuestro próximo gran paso adelante", comenta Ralph Denk, mandamás de la estructura germana.
Respecto a esa evolución que pueda tener el equipo, desde Alemania –exactamente por parte de DPA y Kicker– ya informan que el plan es construir una estructura de ensueño, algo para lo que querrían sumar a sus filas tanto al campeón del mundo Remco Evenepoel, como al no menos espectacular Wout van Aert. El primero forma parte del equipo Quick Step y está bajo contrato. Al segundo, de la formación Visma, le ocurre exactamente lo mismo. Y sí, es este posible modus operandi arrollador el que está creando ciertas suspicacias en el pelotón. Tener patrocinadores fuertes se agradece, pero sin cruzar una peligrosa línea que lleve a un dominio absoluto. Eso piensan, aunque la realidad es que en 2023 el mismo equipo ganó las tres grandes vueltas...
Aunque el director de Bora ya habla como si dirigiese el equipo Red Bull, lo cierto es que la asociación aún no es un hecho, al menos en términos legales. Será el próximo 26 de enero cuando las autoridades austriacas dictaminen si el movimiento cumple o no la legislación vigente. Mientras, la versión oficial de Bora es que toca esperar. "Red Bull aspira en estos momentos a asociarse con BORA-hansgrohe como patrocinador principal a largo plazo. Todo ha sido notificado a la autoridad antimonopolio austriaca, así que pedimos comprensión, pues no se harán más comentarios hasta que finalice la revisión en curso", sentencia el comunicado.