Francisco Salas3 min lecturaEl deporte español es el amplio dominador en muchas disciplinas, que llevan años viendo como en las grandes competiciones suena el himno nacional y en lo más alto hondea la bandera rojigualda. Y eso es gracias a deportistas que alejados de los focos y de la fama son capaces de encontrar lo mejor de sí mismo y dominar disciplinas que les obligan a dejarse la piel entrenando e incluso perdiendo dinero en muchos casos para poder viajar a lo largo y ancho del globo terráqueo compitiendo. Uno de esos deportes es el acuatlón, del que se ha disputado el Campeonato del Mundo, y se ha erigido como amo y señor un triatleta patrio, Kevin Viñuela.
El leonés ha logrado cerrar el círculo en la modalidad de acuatlón y, tras el título nacional logrado en Almazán, Soria; y europeo en Coimbra, Portugal; ha vencido esta madrugada en el mundial celebrado en Townsville, Australia, que tuvo un podio con color español, ya que el gallego Cristian Fernández, que lograra el título en 2023 en Ibiza, fue tercero. Una nueva exhibición que estuvo muy cerca de ser un doblete, pero tuvo un invitado inesperado.
Viñuela, que llegaba a la cita mundialista con la confianza de una temporada redonda en una disciplina que compatibiliza con el triatlón olímpico y el triatlón cross, en éste último también campeón de España, impuso su gran momento controlando en todo momento la prueba que recuperaba el formato clásico de dos transiciones con 2,5 kilómetros de carrera, 1.000 metros de natación y un último segmento de nuevo de 2,5 kilómetros de carrera.
Tras el triatleta de Vegacervera (León) que firmó un tiempo de 28:19, se colocó el australiano Luke Bate a tan solo tres segundos, cerrando el podio el excampeón mundial, Cristian Fernández con un registro de 28:31, después de tener algún problema físico en el tramo final, a pesar de haber salido del segundo segmento en el agua como primer clasificado junto con el ganador. Por esas mismas molestias no se pudo conseguir un 1-2 que hubiera dado aún más lustre al evento.
El triatleta leonés reconoció a la agencia Efe que tenía "las mejores sensaciones" para poder lograr el único título que le quedaba por conquistar en la disciplina esta temporada. "Me faltaba lograr esta victoria para poder hacer historia y ser el primero en conseguirlo". Pero su carrera sigue, ya que su sueño es ser olímpico en Los Ángeles 2028; pero aquí era consciente de que llegaba "en un gran momento de forma, con la confianza total de poderlo conseguir, en la mejor época para no llegar muy desgastado, pero sí preparado", y no ha fallado.