Alejandro Sáez3 min lecturaAccidentado, muy accidentado, resultó el Gran Premio de Catalunya disputado en Montmeló este pasado fin de semana. La carrera del domingo quedó marcada por una multitudinaria caída en la primera curva, así como por el accidente del Pecco Bagnaia (Ducati Desmosedici GP23) poco después. Sus compañeros no pudieron evitarlo y otro piloto pasó por encima de sus piernas, lo que obligó a la Dirección de Carrera a mostrar la bandera roja. El líder del Mundial de MotoGP tuvo que ser atendido por los servicios médicos en mitad de la pista, viviéndose unos momentos de tensión en Montmeló justo antes de ser trasladado hasta la clínica del circuito por el atropello del surafricano Brad Binder.
Bagnaia salió disparado por los aires y Binder no pudo evitarlo, encontrándoselo en el suelo frente a él y acabando pasando por encima de sus piernas, a la altura de la tibia y peroné, con su KTM RC 16. La imagen, lógicamente, fue muy dura, impactando al equipo de Ducati, donde se encontraba la pareja del piloto italiano.
Davide Tardozzi, Team Manager del equipo italiano, se vio obligado a salir del box con ella para trata de calmarla. Pese a la dureza del atropello, tal y como pudo verse en las imágenes, Bagnaia no perdió el conocimiento en ningún momento, aunque sus gestos daban muestra del dolor y de que la movilidad en sus piernas no era completa.
Tanto Bagnaia como Ena Bastianini fueron trasladados en ambulancia al Hospital General de Catalunya para realizarle una revisión completa, donde confirmaron las lesiones. Bagnaia sufre "múltiples contusiones, pero los controles médicos posteriores han revelado que no hay fracturas”, mientras que Bastianini "sufre una fractura no desplazada del maléolo medial del tobillo izquierdo y una fractura subcapital del segundo metacarpiano de la mano izquierda", deberá pasar por quirófano.
Sorprendentemente, Bagnaia salió ileso del escalofrainte atropello, no presentando fracturas. “He tenido mucha suerte hoy. Tengo que dar las gracias”, decía Pecco a MotoGP.com a su salida del hospital, antes de volver a Italia esta misma noche.
El vigente campeón de MotoGP y líder del campeonato se mostraba contrariado y no entendía a qué se debía la extraña caída que tuvo en la curva 2: “No lo sé. Tenía poco grip desde la vuelta de calentamiento. He tenido un gran golpe, un highside que no es normal. Es muy difícil de momento entender qué ha pasado. No ha sido una caída normal. El grip trasero que tenía desde la vuelta de calentamiento ya no era normal”. Sobre su presencia en el GP de San Marino, comentó: “Haremos todo lo posible para estar en Misano y para intentar hacerlo bien”.