Sin duda, el regreso de Pol Espargaró a la competición en la categoría reina del motociclismo fue una de las noticias más deseadas y celebradas. El piloto dio un tremendo susto en Portugal, con un terrible accidente que le ha mantenido de baja y sin competir por varios meses en lo que se recuperaba. Él mismo habló en sus redes sociales de las lesiones que había sufrido tras el mismo y de las secuelas que tenía. Ahora, el de GasGas ha regresado a una jornada en la que se ha sentido "bien en líneas generales", aunque reconoce que ha sido "super estresante en su conjunto". En ellas ha desvelado algunas cuestiones que pueden sorprender, como su situación física y su nivel o el contraste entre la velocidad de su cerebro y el de la moto. Una situación que es cuestión de tiempo que mejore. Son sus primeras reacciones después de que volviera a pilotar este viernes en los libres del GP de Gran Bretaña, donde Aleix voló y Marc Márquez quedó fuera del Top 10.
"Ha sido super estresante todo el conjunto del día, pero ha salido bien, sin ningún percance. Estos días de vuelta, como hay mucho descontrol porque falta musculatura y falta la técnica, son muchos los errores que cometes y no terminar por los suelos ha sido importante", dijo tras su actuación. Su 'truco' es compararse con sus compañeros de KTM: "Intento compararme con mis compañeros de KTM y he terminado a un segundo y medio de ellos dos, que más o menos han terminado por ahí, así que no está muy mal. Evidentemente, no está bien, porque un segundo y medio es muy lejos, pero es ahí donde tienes que sudar la gota gorda para llegar", explicó el piloto.
También reconoció que "hay mucho margen por delante" y que "la moto funciona increíblemente". "Es una pasada lo rápida que es en las rectas, cómo corre y la estabilidad que tiene en las frenadas, así que eso también me ayuda muchísimo", señaló Pol Espargaró. Del mismo modo, indicó que aún está muy por debajo de su mejor nivel: "Técnicamente mi cerebro no es capaz de asimilar tanta información, estas motos corren muchísimo y todo pasa tan rápido que el cerebro no es capaz de entender todo con la rapidez que debería", explicó.
Y continuó: "Tú quieres frenar más tarde, pero el cerebro no te deja. Y tú dices: 'Voy a frenar ahí', pero cuando te das cuenta tu mano ya está agarrando el freno. Es una sensación un poco rara, de no entender la velocidad y toda la potencia, y te sobrepasa todo. Vas un poquito detrás, a contrarreloj aprendiendo todo. Es difícil. Estas motos corren muchísimo".
De cara al fin de semana, el de GasGas fue muy sincero explicando sus intenciones de no "salir muy adelante". Lo explicó así: "No voy a tener muchos rifirrafes en la primera curva y me lo voy a tomar con mucha calma. Quiero terminar la carrera sprint". Sin duda, será clave la "carrera larga", puesto que su físico actual le hará sudar la gota gorda: "La carrera larga me va a costar más terminarla por el físico, pero mañana intentaré coger el ritmo, que mi cerebro asimile todo eso y no tener que estar pensando tanto, porque cuando piensas es cuando estás perdiendo tiempo y al final de la sprint espero que todo salga mucho más natural, pues espero que esta noche el cerebro se ponga en su sitio y supongo que mañana será todo mucho más fácil", concluyó Pol Espergaró.