Una de las grandes noticias del año en MotoGP es sin duda alguna Pedro Acosta, la mayor promesa de los últimos años, que ya se ha convertido en toda una realidad después de ascender como doble campeón del mundo en solo tres años. Es la gran joya de KTM pese a llegar este 2024 al equipo satélite, donde ha estado muy cerca de ser el primero de la marca austriaca en la general, pero fue superado al final por Brad Binder. Sin embargo, su potencial es infinito y desde el año que viene formará parte de la estructura oficial junto al sudafricano.
Y es que KTM ha hecho muchos cambios de cara a lo que viene, ya que ha pasado de tener el equipo GasGas como satélite y el Red Bull como oficial, pero alinear cuatro motos similares en dos estructuras diferentes, pero todas con la apoyo total de la fábrica y el patrocinio de la bebida energética. Y la apuesta ha sido grande, puesto que en esas nuevas monturas estarán Maverick Viñales y Enea Bastianini, lo que le hará tener un cuarto de lo más potente, al nivel o incluso por encima del resto de marcas, y a la espera solo de que funcione la moto.
Pero hay problemas, y de una índole muy complicada, ya que KTM atraviesa una muy difícil situación económica, que de hecho, ha obligado al grupo Pierer Industrie AG a iniciar una reorganización de acuerdo al Reglamento de Reestructuración (RoE). Tal es la situación que tras haber despedido cientos de empleados y mostrar una previsión nefasta para el inicio de 2025, donde tiene intención de no fabricar motos de calle en los dos primeros meses del año, ahora se enfrentan a un concurso de acreedores con auto-administración para tratar de evitar la quiebra.
Aunque no está todo perdido, porque su objetivo es alcanzar un acuerdo sobre el plan de reorganización con los acreedores en un plazo máximo de 90 días. Y mientras tanto podrán seguir trabajando sí, pero solo bajo supervisión judicial para aplicar un plan de reorganización. Esto les va a limitar mucho su desarrollo y va a afectar a sus múltiples equipos de competición. Por ejemplo en el Dakar en lugar de las seis motos del año pasado van a ir con solo 3 ahora, así como al resto de modalidades como Enduro, MX y demás. Sin embargo, por ahora siguen mostrando su compromiso con el Mundial de MotoGP, por lo que al menos a corto plazo, los pilotos pueden estar tranquilos, aunque la situación es preocupante.