Aston Martín se presenta como uno de los gallitos del Mundial en los próximos años. Al menos, lo está dando todo para ello. Ha logrado retener por los dos próximos años a uno de los tres pilotos más valorados del 'paddock', como es Fernando Alonso. Contará a partir de 2026 con Honda, la unidad de potencia ganadora de los últimos mundiales de Fórmula 1. Cuenta con el alumno aventajado de Adrian Newey, el ingeniero británico Dan Fallows, para hacer sus coches e incluso está en la puja por el propio Newey...
Su ambición no tiene límites y va encaminada a "ganar el Mundial", según reconocía la principal cabeza visible de Honda hace algunos días. Y no sólo quiere que su nombre aparezca en la F1, sino que también está desarrollando otras opciones para pelear por otras categorías del automovilismo. Ha podido comprobar que los triunfos en el plano deportivo repercuten en la mejor imagen de la marca y, a la postre, en mayores ventas.
Uno de esos proyectos pretendía llevar el próximo año un coche competitivo la categoría GT del Mundial de Resistencia (WEC). Sin embargo, la FIA ha anunciado una decisión que le complica la situación. Tras las Seis Horas de Imola advirtió a los interesados en entrar en 2025 que tendrán que inscribir un mínimo de dos prototipos Hypercars si quieren participar en la competición.
Aparte de Aston Martin, los perjudicados son Cadillac, Lamborghini e Isotta Fraschini, que pretendían también dar el salto a esta categoría. En el caso de los británicos serían tres prototipos y sus respectivos equipos y pilotos, ya que no sólo querían participar en el WEC, sino también la resistencia norteamericana, la IMSA.
La idea de competir con un Aston Martin en otras categorías cuando acabe su carrera en la Fórmula 1 -o durante- está en la cabeza de Fernando Alonso, que ya ha ganado dos veces las 24 horas de Le Mans. A partir de 2027 se abría otro mundo dependiendo de cómo se sintiera y de su rendimiento. Su contrato con Aston Martin no sólo era por estas dos temporadas, en las que correrá en la F1, sino que luego, si dejaba el Gran Circo, seguiría como embajador de la marca y participaría en los muchos proyectos, como éste, que tenían en mente.
No obstante, no todo está perdido. Sólo es un contratiempo y el equipo británico está dispuesto a seguir adelante con su deseo de participar en el Mundial de Resistencia. Tendrá que agrandar su compromiso y hacer una mayor inversión, pero saldría ya a competir a partir del próximo año.